"...Ellos entonce dijeron a Jesús: ¿Qué señal haces para que viéndola creamos en ti? ¿Qué obra realizas? Nuestros padres comieron el maná en el desierto, según está escrito: Pan del cielo les dio a comer. Jesús les respondió: En verdad, en verdad os digo: No fue Moisés quien os dio el pan del cielo; es mi Padre el que os da el verdadero pan del cielo; porque el pan de Dios es el que baja del cielo y da la vida al mundo. Entonces le dijeron: Señor, danos siempre de ese pan. Les dijo Jesús: Yo soy el pan de la vida. El que venga a mí, no tendrá hambre, y el que crea en mí, no tendrá nunca sed".
Juan 6, 30-35
La Eucaristía, otra muestra del amor sin límites de Jesús por mí.- Tanto nos ha querido el Señor que, no sólo se echó encima todos nuestros pecados, nuestras deudas, para pagarlas Él y rescatarnos, haciéndose hombre igual a nosotros en todo, menos en la falta, sintiendo nuestros mismos dolores y sufrimientos, nuestras mismas alegrías y tristezas, sino que no quiso separarse de nosotros, ni siquiera mientras quedábamos aquí en la tierra, transformándose para ello, transubstanciándose, en pan, para servirnos de alimento, de alimento para la vida eterna, alimento que no permitirá que tengamos hambre nunca mas. ¡Es mucho amor! No nos queda sino tratar de devolver, de alguna manera, así sea una partecita insignificante de ese amor, buscando que, todo aquel que quiera, vaya también a comer de ese pan bajado del cielo y que dá la verdadera vida.
Propósito: Hoy mi oración será: !Señor, dáme siempre de ese Pan¡
¡ FELIZ DÍA, JESÚS VIVE Y YO LO CREO Y LO PROCLAMO !
Martes. Mayo 2 de 2017
J. RUIZ
No hay comentarios:
Publicar un comentario