viernes, 31 de mayo de 2019

UN TIEMPITO PARA DIOS Y SU PALABRA


   "...En aquellos días, María se encaminó presurosa a un pueblo de las montañas de Judea, y entrando en la casa de Zacarías, saludó a Isabel. En cuanto ésta oyó el saludo de María, la criatura saltó en su seno. Entonces Isabel quedó llena del Espíritu Santo, y levantando la voz, exclamó: “¡Bendita tú entre las mujeres y bendito el fruto de tu vientre! ¿Quién soy yo, para que la madre de mi Señor venga a verme? Apenas llegó tu saludo a mis oídos, el niño saltó de gozo en mi seno. Dichosa tú, que has creído, porque se cumplirá cuanto te fue anunciado de parte del Señor”. Entonces dijo María: “Mi alma glorifica al Señor y mi espíritu se llena de júbilo en Dios, mi salvador, porque puso sus ojos en la humildad de su esclava. Desde ahora me llamarán dichosa todas las generaciones, porque ha hecho en mí grandes cosas el que todo lo puede. Santo es su nombre y su misericordia llega de generación en generación a los que lo temen. Él hace sentir el poder de su brazo: dispersa a los de corazón altanero, destrona a los potentados y exalta a los humildes. A los hambrientos los colma de bienes y a los ricos los despide sin nada. Acordándose de su misericordia, vino en ayuda de Israel, su siervo, como lo había prometido a nuestros padres, a Abraham y a su descendencia, para siempre”. María permaneció con Isabel unos tres meses, y luego regresó a su casa.
                                                                                               Lucas 1, 39-56
      Amor para dar y compartir, fue lo que tuvo María desde que dio el sí que salvó a la humanidad.- Así nos la pinta Lucas hoy en su Evangelio, narrándonos la visita que hizo a su prima Isabel, tan pronto supo que ella también estaba encinta. Fue a servirle, a asistirla durante los cuidados de su embarazo, porque la disposición al servicio es la manifestación más clara del amor. No importaron ni la distancia, ni lo abrupto de los caminos, ni los peligros de asaltantes durante las largas jornadas de marcha. El amor hace que todos esos inconvenientes desaparezcan. Ella se siente bendecida y su alma "glorifica al Señor porque puso sus ojos en la humildad de su esclava", y esa alegría hace dulces los pasos amargos y se contagia a su prima y al hijo de su vientre que salta de gozo al reconocer a Jesús, Salvador del mundo, y le hace exclamar gozosa: "dichosa tú que has creído". Es la alegría de la fe. Hagámosla nuestra.
Propósito: Hoy repetiré con María: "Glorifica mi alma al Señor porque  ha puesto sus ojos en la humildad de su esclava"
                     ¡ FELIZ DÍA, JESÚS VIVE Y YO LO CREO Y LO PROCLAMO !


J. RUIZ                                                                           Viernes. Mayo 31 de 2019

jueves, 30 de mayo de 2019

UN TIEMPITO PARA DIOS Y SU PALABRA


   "...En aquel tiempo, Jesús dijo a sus discípulos: Dentro de poco tiempo ya no me verán; y dentro de otro poco me volverán a ver. Algunos de sus discípulos se preguntaban unos a otros: ¿Qué querrá decir con eso de que: Dentro de poco tiempo ya no me verán, y dentro de otro poco me volverán a ver, y con eso de que: Me voy al Padre? Y se decían: ¿Qué significa ese ‘un poco? No entendemos lo que quiere decir. Jesús comprendió que querían preguntarle algo y les dijo: Están confundidos porque les he dicho: ‘Dentro de poco tiempo ya no me verán y dentro de otro poco me volverán a ver’. Les aseguro que ustedes llorarán y se entristecerán, mientras el mundo se alegrará. Ustedes estarán tristes, pero su tristeza se transformará en alegría”.
                                                                                                                Juan 16, 16-20
      Creer en Jesús no es, simplemente, conocer y creer cosas acerca de Él: es creer en Él.- Creer que sus Palabras y acciones están de acuerdo; que ésa es la forma verdadera de vivir la verdadera vida; creer que ésa alegría que sentimos, si procuramos vivir como Él, es Él mismo que vive en nosotros; creer que esa luz que, de alguna manera irradiamos, si amamos y servimos a los otros, como Él nos enseñó, es el Espíritu del Padre que ha venido a permanecer  con nosotros para enseñarnos y a recordarnos todo lo que Él nos dijo. Jesús va al Padre, su partida se acerca, pero es necesario porque, cuando Él se vaya nos enviará al Consolador y nuestra alegría y nuestra vida misma serán completas.
Propósito: Hoy trataré de ser consciente de que es necesario que el Maestro vaya al Padre. Pero que, de todas maneras, seguirá con nosotros.      
                     ¡ FELIZ DÍA, JESÚS VIVE Y YO LO CREO Y LO PROCLAMO !


J. RUIZ                                                                           Jueves. Mayo 30 de 2019

miércoles, 29 de mayo de 2019

UN TIEMPITO PARA DIOS Y SU PALABRA


   "...En aquel tiempo, Jesús dijo a sus discípulos: Aún tengo muchas cosas que decirles, pero todavía no las pueden comprender. Pero cuando venga el Espíritu de verdad, él los irá guiando hasta la verdad plena, porque no hablará por su cuenta, sino que diría lo que haya oído y les anunciará las cosas que van a suceder. El me glorificará, porque primero recibirá de mí lo que les vaya comunicando. Todo lo que tiene el Padre es mío. Por eso he dicho que tomará de lo mío y se lo comunicará a ustedes”.
         Juan 16, 12-15
      "El Espíritu de Verdad nos guiará hasta la verdad plena".- Y ¿cuál podrá ser esa verdad plena que tanta importancia le merece a Jesús? No son cosas de otro mundo, misteriosas o escatológicas. El Espíritu es un consolador y un consejero. Él viene es a darnos el conocimiento necesario para que entendamos la Palabra de Dios, y la fuerza necesaria para que la pongamos en práctica. Y así, ya que ésa , su Palabra, es la voluntad de Dios, nuestra verdad y nuestra alegría y felicidad serán plenas. Y la "tierra nueva y el cielo nuevo" habrán llegado, y el Reino de Dios estará dentro de nosotros y su luz se irradiará por todo el mundo, destruyendo todo lo que es vanidad (vano, vacío, como su nombre lo indica) y será el Reino del Espíritu, que no perece, ni se corroe, ni se guarda en bodegas ni graneros.
Propósito: Hoy mi oración será: Señor, enséñame y ayúdame a ayudar.
                   ¡ FELIZ DÍA, JESÚS VIVE Y YO LO CREO Y LO PROCLAMO !
                                                                     Miércoles. Mayo 29 de 2019
J. RUIZ 

martes, 28 de mayo de 2019

UN TIEMPITO PARA DIOS Y SU PALABRA


   "...En aquel tiempo, Jesús dijo a sus discípulos: Me voy ya al que me envió y ninguno de ustedes me pregunta: ‘¿A dónde vas?’ Es que su corazón se ha llenado de tristeza porque les he dicho estas cosas. Sin embargo, es cierto lo que les digo: les conviene que me vaya; porque si no me voy, no vendrá a ustedes el Paráclito; en cambio, si me voy, yo se lo enviaré. Y cuando él venga, establecerá la culpabilidad del mundo en materia de pecado, de justicia y de juicio; de pecado, porque ellos no han creído en mí; de justicia, porque me voy al Padre y ya no me verán ustedes; de juicio, porque el príncipe de este mundo ya está condenado”.
                                                                         Juan 16, 5-11
      El Señor Jesús prepara a sus amigos para su partida porque se va a prepararles una morada en casa de su Padre.-  Y además porque es necesario para que les envíen también al Espíritu Consolador a que les recuerde las enseñanzas del Maestro, se las haga comprender y les de fuerza para hacerlas vida cotidiana. Cuando un amigo o un familiar queridos se ausentan, indudablemente se lamenta y se siente su partida. Pero si sabemos que va a ser reconocido, que va a ejecutar su verdadera misión, y de la cual nos dejó encargados también a nosotros, y además creemos en Él que nos ha dicho que no nos abandonará, que siempre estará con nosotros, y todo avalado con la muestra mayor de amor al entregar su vida por nosotros, tenemos que alegrarnos por Él y por nosotros, porque sólo así nuestra felicidad será completa.
Propósito: Hoy procuraré, cada que me acuerde, invocar al espíritu Consolador, en medio de tantas tribulaciones.
                     ¡ FELIZ DÍA, JESÚS VIVE Y YO LO CREO Y LO PROCLAMO !
                                                                           Martes. Mayo 28 de 2019
J. RUIZ 

domingo, 26 de mayo de 2019

UN TIEMPITO PARA DIOS Y SU PALABRA


   "...En aquel tiempo, Jesús dijo a sus discípulos: El que me ama, cumplirá mi palabra y mi Padre lo amará y vendremos a él y haremos en él nuestra morada. El que no me ama no cumplirá mis palabras. Y la palabra que están oyendo no es mía, sino del Padre, que me envió. Les he hablado de esto ahora que estoy con ustedes; pero el Paráclito, el Espíritu Santo que mi Padre les enviará en mi nombre, les enseñará todas las cosas y les recordará todo cuanto yo les he dicho.
La paz les dejo, mi paz les doy. No se la doy como la da el mundo. No pierdan la paz ni se acobarden. Me han oído decir: ‘Me voy, pero volveré a su lado’. Si me amaran, se alegrarían de que me vaya al Padre, porque el Padre es más que yo. Se lo he dicho ahora, antes de que suceda, para que cuando suceda, crean”.
                            Juan 14, 23-29
      El amor lleva a la paz. Y sólo el amor a Dios y a los demás, lleva a la paz del espíritu.- Pero esa paz no significa quietud y despreocupación. No. Esa paz es la capacidad de mirar a los otros y sentir que ellos y nosotros somos fraternidad; que nuestra vida debe ser solidaria con todos los que nos rodean y con lo que nos rodea. Esto es, esa paz es la que nos hace capaces de servir a los hermanos sin distinción ni exclusivismo alguno. Es la paz que "no podemos perder" porque Jesús dijo que "Me voy, pero volveré a su lado" y el Espíritu Paráclito que el Padre nos enviará nos enseñará y nos recordará todas las cosas necesarias para que esta paz sea completa y perdure eternamente.
Propósito: Hoy meditaré un  poco en lo mucho que se habla de paz en mí país y en lo poco que parece estarse logrando.
                    ¡ FELIZ DÍA, JESÚS VIVE Y YO LO CREO Y LO PROCLAMO !
                                                                        Domingo. Mayo 26 de 2019
J. RUIZ

sábado, 25 de mayo de 2019

UN TIEMPITO PARA DIOS Y SU PALABRA


   "...En aquel tiempo, Jesús dijo a sus discípulos: Si el mundo los odia, sepan que me han odiado a mí antes que a ustedes. Si fueran del mundo, el mundo los amaría como cosa suya; pero el mundo los odia porque no son del mundo, pues al elegirlos, yo los he separado del mundo. Acuérdense de lo que les dije: El siervo no es superior a su señor. Si a mí me han perseguido, también a ustedes los perseguirán, y el caso que han hecho de mis palabras lo harán de las de ustedes. Todo esto se lo van a hacer por mi causa, pues no conocen a aquel que me envió”.
                                                                               Juan 15, 18-21
      El mundo nos va a odiar simplemente porque nuestros parámetros de vida, los mismos de Jesús, no están de acuerdo con los suyos.- Y por eso es conveniente que estemos siempre en comunión de criterios. Que nuestro criterio único y permanente sea Cristo. No es fácil unificar criterios, no es fácil vivir en comunión. Es más fácil irnos adaptando a las diversas circunstancias que el mundo nos va presentando. El problema es que Jesús y su criterio de vida es único e inamovible. Él es el mismo ayer, hoy y siempre. Su Ley del amor y del servicio a los demás, no va a cambiar. Será el mundo el que deba irse adaptando poco a poco a esa comunión necesaria para poder marchar en la misma dirección y así podamos conocer a Aquel que lo ha enviado.
Propósito: Hoy pondré especial cuidado en mi comunión con los hermanos.
                  ¡ FELIZ DÍA, JESÚS VIVE Y YO LO CREO Y LO PROCLAMO !
                                                                       Sábado. Mayo 25 de 2019
J. RUIZ 

jueves, 23 de mayo de 2019

UN TIEMPITO PARA DIOS Y SU PALABRA


   "...En aquel tiempo, Jesús dijo a sus discípulos: Como el Padre me ama, así los amo yo. Permanezcan en mi amor. Si cumplen mis mandamientos, permanecen en mi amor; lo mismo que yo cumplo los mandamientos de mi Padre y permanezco en su amor. Les he dicho esto para que mi alegría esté en ustedes y su alegría sea plena”.
                                              Juan 15, 9-11
      Amor! Jesús no sabe hablar sino de amor.- Y como el amor es servicio, es lo que hace todo el tiempo. Y quiere que nosotros lo imitemos. Nos pide que permanezcamos en su amor para que Él también permanezca en nosotros. Es que ¿habrá algo mejor que permanecer con nuestro amor? ¿Que estar a toda hora con él? Pero "permanecer en su amor", no es estar ahí sin hacer nada. Tenemos que "estar" con Él, haciendo lo que nos ha enseñado, haciendo la voluntad del Padre Misericordioso, que es que nos amemos unos a otros como Él mismo nos ha amado. Amarle a Él, amar a nuestros hermanos, sin condición, sin exclusiones, y servirles, como si de Él mismo se tratara. Esa es nuestra misión: amar y servir, para que "nuestra alegría sea plena".
Propósito: Hoy tendré que revisar si yo sí permanezco la mayor parte de mi tiempo contigo.
                   ¡ FELIZ DÍA, JESÚS VIVE Y YO LO CREO Y LO PROCLAMO !
                                                                         Jueves. Mayo 23 de 2019
J. RUIZ

miércoles, 22 de mayo de 2019

UN TIEMPITO PARA DIOS Y SU PALABRA


   "...En aquel tiempo, Jesús dijo a sus discípulos: Yo soy la verdadera vid y mi Padre es el viñador. Al sarmiento que no da fruto en mí, él lo arranca, y al que da fruto lo poda para que dé más fruto. Ustedes ya están purificados por las palabras que les he dicho. Permanezcan en mí y yo en ustedes. Como el sarmiento no puede dar fruto por sí mismo, si no permanece en la vid, así tampoco ustedes, si no permanecen en mí. Yo soy la vid, ustedes los sarmientos; el que permanece en mí y yo en él, ése da fruto abundante, porque sin mí nada pueden hacer. Al que no permanece en mí se le echa fuera, como al sarmiento, y se seca; luego lo recogen, lo arrojan al fuego y arde. Si permanecen en mí y mis palabras permanecen en ustedes, pidan lo que quieran y se les concederá. La gloria de mi Padre consiste en que den mucho fruto y se manifiesten así como discípulos míos”.
                                                                   Juan 15, 1-8
      Sin Jesús no podemos hacer, ni ser, nada.- "El que permanece en mí y yo en él, ése da fruto abundante". Y recordamos: "Velad y orad...". Solamente así, velando y orando, podremos permanecer en Cristo. Si dejamos de hacerlo nos iremos desviando por senderos embusteros que nos llevan a metas no deseadas y que son contrarias a la Tierra Nueva y al Cielo Nuevo del amor y la justicia social, que andamos buscando como meta final y el fin para el cual fuimos creados, en el proyecto inicial y primigenio del Padre Bueno y Misericordioso. El "amaos los unos a los otros como yo os he amado", lo podemos complementar con un "servíos los unos a los otros como yo lo he hecho", y el cuadro de la viña feraz y de frutos sanos y abundantes, quedará completa y seremos verdaderos discípulos del Viñador.
Propósito: Hoy quiero pedirte, Señor, el poder permanecer velando y orando para poder estar siempre en Tí y que Tú estés siempre en mí.
                     ¡ FELIZ DÍA, JESÚS VIVE Y YO LO CREO Y LO PROCLAMO ! 
                                                                       Miércoles. Mayo 22 de 2019
J. RUIZ 

sábado, 11 de mayo de 2019

UN TIEMPITO PARA DIOS Y SU PALABRA


   "...En aquel tiempo, muchos discípulos de Jesús dijeron al oír sus palabras: Este modo de hablar es intolerable, ¿quién puede admitir eso?. Dándose cuenta Jesús de que sus discípulos murmuraban, les dijo: ¿Esto los escandaliza? ¿Qué sería si vieran al Hijo del hombre subir a donde estaba antes? El Espíritu es quien da la vida; la carne para nada aprovecha. Las palabras que les he dicho son espíritu y vida, y a pesar de esto, algunos de ustedes no creen. (En efecto, Jesús sabía desde el principio quiénes no creían y quién lo habría de traicionar). Después añadió: Por eso les he dicho que nadie puede venir a mí, si el Padre no se lo concede.
Desde entonces, muchos de sus discípulos se echaron para atrás y ya no querían andar con él. Entonces Jesús les dijo a los Doce: ¿También ustedes quieren dejarme? Simón Pedro le respondió: Señor, ¿a quién iremos? Tú tienes palabras de vida eterna; y nosotros creemos y sabemos que tú eres el Santo de Dios.
                                                     Juan 6, 60-69
      "El Espíritu es quien da la vida; la carne para nada aprovecha."- Somos seres espirituales que necesitamos la carne para manifestarnos. Pero lo que nos hace ser, es el espíritu. Esa es la fuerza que nos impulsa hacia adelante en el camino que nos toque recorrer. Es el espíritu el que nos hace entender las respuestas de la vida a esas ansias que todos tenemos por dentro siempre, de trascender, de ir más allá, de buscar, de estar siempre de camino. Y las "Palabras que os he dicho son espíritu y vida", dice Jesús, al final de su discurso sobre la Eucaristía. Y, si no somos capaces de reconocer esa vida que Jesús nos trae, vamos a ser como aquellos discípulos que, al no poder entender sus palabras, "se echaron para atrás y ya no querían andar con Él". Y es ahí donde entran el amor, la fidelidad y la fe que uno tiene en aquel a quien ama. Si creemos en Él porque le amamos, vamos a responder con Pedro: "Señor ¿ a quién iremos? Tú tienes Palabras de vida eterna". 
Propósito: Hoy revisaré si yo sí amo a Jesús, o si estoy con Él sólo porque ha satisfecho mis múltiples necesidades.
                    ¡ FELIZ DÍA, JESÚS VIVE Y YO LO CREO Y LO PROCLAMO !
                                                                          Sábado. Mayo 11 de 2019
J. RUIZ 

viernes, 10 de mayo de 2019

UN TIEMPITO PARA DIOS Y SU PALABRA


   "...En aquel tiempo, los judíos se pusieron a discutir entre sí: ¿Cómo puede éste darnos a comer su carne?. Jesús les dijo: Yo les aseguro: Si no comen la carne del Hijo del hombre y no beben su sangre, no podrán tener vida en ustedes. El que come mi carne y bebe mi sangre, tiene vida eterna y yo lo resucitaré el último día. Mi carne es verdadera comida y mi Sangre es verdadera bebida. El que come mi carne y bebe mi sangre, permanece en mí y yo en él. Como el Padre, que me ha enviado, posee la vida y yo vivo por él, así también el que me come vivirá por mí. Éste es el pan que ha bajado del cielo; no es como el maná que comieron sus padres, pues murieron. El que come de este pan vivirá para siempre. Esto lo dijo Jesús enseñando en la sinagoga de Cafarnaúm".
            Juan 6, 52-59
      La importancia que le demos a la Eucaristía es vital en nuestra vida cristiana.- Por eso Jesús, antes de irse, en su cena de despedida con los apóstoles, les hace tal énfasis en ese compartir, ese comulgar, que es la Eucaristía, que allí instituyó, ordenando que lo hicierámos siempre en memoria suya, y dejando muy claras tres cosas: tenemos que comer la carne de Jesús y beber su sangre; que si no lo hacemos no podemos tener vida; y que esta vida es la vida eterna y es condición para nuestra resurrección. Así que sí: la sagrada comunión es vital en nuestra vida cristiana. Sin ella todo lo demás, en alguna forma carece de sentido. Y, como les decía antes de ayer, comulgar con Jesús significa, en palabras del Papa Francisco: "pensar como Él, amar como Él, ver cómo Él y caminar como Él". Preguntémonos siempre, en cada circunstancia de nuestra vida, qué haría Jesús en mi lugar, cómo vería Él esta situación y cómo la resolvería. Y, muy importante, no olvidemos que Él, el Hijo, siempre acudía a su Padre para contarle sus cosas e implorar su consejo y su ayuda. Y eso, es la Oración, que nuca nos debe faltar.
Propósito: Hoy haré un espacio para conversar con el Padre e implorar su ayuda, y veré que esto se vuelva en mí, una costumbre.
                   ¡ FELIZ DÍA, JESÚS VIVE Y YO LO CREO Y LO PROCLAMO !
                                                                        Viernes. Mayo 10 de 2019
J. RUIZ 

jueves, 9 de mayo de 2019

UN TIEMPITO PARA DIOS Y SU PALABRA


   "...En aquel tiempo, Jesús dijo a los judíos: Nadie puede venir a mí, si no lo atrae el Padre, que me ha enviado; y a ése yo lo resucitaré el último día. Está escrito en los profetas: Todos serán discípulos de Dios. Todo aquel que escucha al Padre y aprende de él, se acerca a mí. No es que alguien haya visto al Padre, fuera de aquél que procede de Dios. Ese sí ha visto al Padre. Yo les aseguro: el que cree en mí, tiene vida eterna. Yo soy el pan de la vida. Sus padres comieron el maná en el desierto y sin embargo, murieron. Este es el pan que ha bajado del cielo para que, quien lo coma, no muera. Yo soy el pan vivo que ha bajado del cielo; el que coma de este pan vivirá para siempre, y el pan que yo les voy a dar es mi carne para que el mundo tenga vida¨.
                                                                                                               Juan 6, 44-51
      El discurso Eucarístico sigue diciéndonos lo mismo.- Es que Jesús quiere estar seguro de que entendemos lo que significa su amor y el amor del Padre por nosotros; que entendamos que estamos hechos para trascender, que nuestro camino no se acaba aquí en la tierra; que su Palabra es el Pan que es Palabra de Dios y que es Vida eterna; y que, si creemos en Él, también creemos en Aquel que nos lo envió y que, entonces tendremos vida eterna. Y que el mejor regalo que nos puede hacer es el don de la fe. Digámosle, pues, como ayer: "Señor, danos siempre de ese pan", danos el don de creer en tu Palabra que es el Pan que nos saciará y no nos dejará morir.
Propósito: Hoy seguiré meditando acerca de las afirmaciones de Jesús acerca del alimento que no nos dejará tener más hambre.
                    ¡ FELIZ DÍA, JESÚS VIVE Y YO LO CREO Y LO PROCLAMO !
                                                                            Jueves. Mayo 9 de 2019
J. RUIZ 

miércoles, 8 de mayo de 2019

UN TIEMPITO PARA DIOS Y SU PALABRA


   "...En aquel tiempo, Jesús dijo a la multitud: Yo soy el pan de la vida. El que viene a mí no tendrá hambre, y el que cree en mí nunca tendrá sed. Pero como ya les he dicho: me han visto y no creen. Todo aquel que me da el Padre viene hacia mí; y al que viene a mí yo no lo echaré fuera, porque he bajado del cielo, no para hacer mi voluntad, sino la voluntad del que me envió. Y la voluntad del que me envió es que yo no pierda nada de lo que él me ha dado, sino que lo resucite en el último día. La voluntad de mi Padre consiste en que todo el que vea al Hijo y crea en él, tenga vida eterna y yo lo resucite en el último día”.
                                   Juan 6, 35-40
       Creer en Jesús, comulgar con Él, según el Papa Francisco, significa "pensar como Él, amar como Él, ver como Él, caminar como Él".- En una palabra: tratar 
de ser como Él, con la confianza puesta siempre en que "la voluntad del Padre es que Jesús no pierda nada de lo que le ha dado". Y en que la voluntad del Padre es que "todo el que vea al Hijo y crea en Él, tenga vida eterna y Jesús lo resucite en el último día". El "pan nuestro de cada día", que pedimos en la oración, no es solamente el pan material que sustenta nuestro cuerpo, sino también esa fuerza espiritual que fortalece el alma, para que podamos seguir adelante con la cruz de cada día, a pesar de todas las fuerzas contrarias que obstaculizan nuestro camino. Creamos, tengamos fe, y lo demás se nos dará.
Propósito: Hoy te pido, Señor, fortalezcas mi fe que tantas veces tambalea ante los halagos del mundo.
                  ¡ FELIZ DÍA, JESÚS VIVE Y YO LO CREO Y LO PROCLAMO !
                                                                      Miércoles. Mayo 8 de 2019
J. RUIZ 

martes, 7 de mayo de 2019

UN TIEMPITO PARA DIOS Y SU PALABRA


   "...Ellos entonces dijeron a Jesús: ¿Qué señal haces para que viéndola creamos en ti? ¿Qué obra realizas? Nuestros padres comieron el maná en el desierto, según está escrito: Pan del cielo les dio a comer. Jesús les respondió: En verdad, en verdad os digo: No fue Moisés quien os dio el pan del cielo; es mi Padre el que os da el verdadero pan del cielo; porque el pan de Dios es el que baja del cielo y da la vida al mundo. Entonces le dijeron: Señor, danos siempre de ese pan. Les dijo Jesús: Yo soy el pan de la vida. El que venga a mí, no tendrá hambre, y el que crea en mí, no tendrá nunca sed".
                                                                                                                 Juan 6, 30-35
      En el Evangelio continuamos con la lectura del discurso del Pan de vida en el capítulo seis de Juan. Jesús se revela como pan de vida, como alimento que sacia nuestra hambre. Su palabra nos dice que el único pan que nos hace vivir es el amor. No es extraño, por ello, que los relatos de resurrección se den siempre entorno al pan, a las comidas, a la mesa compartida. En este gesto-símbolo no solo descubrimos la presencia del Resucitado en medio de la comunidad, es también una invitación a ser pan vivo para saciar el hambre de tantos hermanos nuestros. 
Propósito: Hoy hagamos nuestra la petición de los discípulos: «Señor, danos siempre de este pan».

   "Primero sea el pan
después la libertad.
(La libertad con hambre
es una flor encima de un cadáver).

Donde hay pan,
allí está Dios.
"El arroz es un cielo",
dice el poeta de Asia.
La tierra
es un plato
gigantesco de arroz,
un pan inmenso y nuestro,
para el hambre de todos.
Dios se hace Pan, trabajo para el pobre,
dice el profeta Ghandi.

La Biblia es un menú de Pan fraterno.
Jesús es el Pan vivo.
El universo es nuestra mesa, hermanos.

Las masas tienen hambre,
y este Pan es su carne,
destrozada en la lucha,
vencedora en la muerte.

Somos familia en la fracción del pan.
Sólo al partir el pan
podrán reconocernos.
Seamos pan, hermanos.

Danos, oh Padre, el pan de cada día:
el arroz, o el maíz, o la tortilla,
el pan del Tercer Mundo"
                           (Pedro Casaldáliga)

                  ¡ FELIZ DÍA, JESÚS VIVE Y YO LO CREO Y LO PROCLAMO !


J. RUIZ                                                                           Martes. Mayo 7 de 2019

lunes, 6 de mayo de 2019

UN TIEMPITO PARA DIOS Y SU PALABRA


   "...Después de la multiplicación de los panes, cuando Jesús dio de comer a cinco mil hombres, sus discípulos lo vieron caminando sobre el lago. Al día siguiente, la multitud, que estaba en la otra orilla del lago, se dio cuenta de que allí no había más que una sola barca y de que Jesús no se había embarcado con sus discípulos, sino que éstos habían partido solos. En eso llegaron otras barcas desde Tiberíades al lugar donde la multitud había comido el pan. Cuando la gente vio que ni Jesús ni sus discípulos estaban allí, se embarcaron y fueron a Cafarnaúm para buscar a Jesús. Al encontrarlo en la otra orilla del lago, le preguntaron: Maestro, ¿cuándo llegaste acá? Jesús les contestó: Yo les aseguro que ustedes no me andan buscando por haber visto signos, sino por haber comido de aquellos panes hasta saciarse. No trabajen por ese alimento que se acaba, sino por el alimento que dura para la vida eterna y que les dará el Hijo del hombre; porque a éste, el Padre Dios lo ha marcado con su sello. Ellos le dijeron: ¿Qué debemos hacer para llevar a cabo las obras de Dios? Respondió Jesús: La obra de Dios consiste en que crean en aquél a quien él ha enviado".
                                                        Juan 6, 22-29
      Lo que tenemos que hacer es creer en Aquel que nos fue enviado.- Nos lo dijo Jesús en una de sus apariciones después de la Resurrección: "La obra de Dios consiste en que crean en aquel a quien Él ha enviado". No que creamos solamente porque nos da el alimento de todos los días, para el cuerpo. Eso no dura sino un momento y otra vez tenemos hambre. Y el hambre de algo que talvez no sabemos qué es, de algo que no se sacia con la comida, debe ser hambre de Dios. Por eso el hombre siempre anda queriendo algo, buscando algo, siempre insatisfecho. Y "eso" que tanto anhelamos, sólo lo tendremos plenamente, cuando hayamos hecho la voluntad del Padre, cuando "creamos en aquel que nos ha enviado", porque Él es quien nos trae la Palabra que manifiesta la voluntad divina. Comencemos a creer: "Señor mío y Dios mío".
Propósito: Hoy quiero convencerme de que necesito más que desayuno, almuerzo y comida.
                    ¡ FELIZ DÍA, JESÚS VIVE Y YO LO CREO Y LO PROCLAMO !


                                                                             Lunes. Mayo 6 de 2019
J. RUIZ 

domingo, 5 de mayo de 2019

UN TIEMPITO PARA DIOS Y SU PALABRA


   "...En aquel tiempo, Jesús se les apareció otra vez a los discípulos junto al lago de Tiberíades. Se les apareció de esta manera: Estaban juntos Simón Pedro, Tomás (llamado el Gemelo), Natanael (el de Caná de Galilea), los hijos de Zebedeo y otros dos discípulos. Simón Pedro les dijo: Voy a pescar. Ellos le respondieron: También nosotros vamos contigo. Salieron y se embarcaron, pero aquella noche no pescaron nada. Estaba amaneciendo, cuando Jesús se apareció en la orilla, pero los discípulos no lo reconocieron. Jesús les dijo: Muchachos, ¿han pescado algo?. Ellos contestaron: No. Entonces él les dijo: Echen la red a la derecha de la barca y encontrarán peces. Así lo hicieron, y luego ya no podían jalar la red por tantos pescados. Entonces el discípulo a quien amaba Jesús le dijo a Pedro: Es el Señor. Tan pronto como Simón Pedro oyó decir que era el Señor, se anudó a la cintura la túnica, pues se la había quitado, y se tiró al agua. Los otros discípulos llegaron en la barca, arrastrando la red con los pescados, pues no distaban de tierra más de cien metros. Tan pronto como saltaron a tierra, vieron unas brasas y sobre ellas un pescado y pan. Jesús les dijo: Traigan algunos pescados de los que acaban de pescar. Entonces Simón Pedro subió a la barca y arrastró hasta la orilla la red, repleta de pescados grandes. Eran ciento cincuenta y tres, y a pesar de que eran tantos, no se rompió la red. Luego les dijo Jesús: Vengan a almorzar. Y ninguno de los discípulos se atrevía a preguntarle: ¿Quién eres?, porque ya sabían que era el Señor. Jesús se acercó, tomó el pan y se lo dio y también el pescado. Esta fue la tercera vez que Jesús se apareció a sus discípulos después de resucitar de entre los muertos. Después de almorzar le preguntó Jesús a Simón Pedro: Simón, hijo de Juan, ¿me amas más que éstos? él le contestó: Sí, Señor, tú sabes que te quiero. Jesús le dijo: Apacienta mis corderos. Por segunda vez le preguntó: Simón, hijo de Juan, ¿me amas?  Él le respondió: Sí, Señor; tú sabes que te quiero. Jesús le dijo: Pastorea mis ovejas. Por tercera vez le preguntó: Simón, hijo de Juan, ¿me quieres? Pedro se entristeció de que Jesús le hubiera preguntado por tercera vez si lo quería, y le contestó: Señor, tú lo sabes todo; tú bien sabes que te quiero. Jesús le dijo: Apacienta mis ovejas. ”Yo te aseguro: cuando eras joven, tú mismo te ceñías la ropa e ibas a donde querías; pero cuando seas viejo, extenderás los brazos y otro te ceñirá y te llevará a donde no quieras. Esto se lo dijo para indicarle con que género de muerte habría de glorificar a Dios. Después le dijo: Sígueme”.
                                                                                   Juan 21, 1-19
      Ya nuestra Madre nos lo había dicho: "Haced lo que Él os diga". Y hoy Jesús mismo nos repite: "Echad las redes donde yo os diga".- Tenemos que aprender a hacerle caso; tenemos que aprender a entender las señales que nos llegan de todas partes, para que podamos dejar de tener miedo; para que recobremos la confianza que, a veces, por los golpes de la vida, talvez hemos perdido; para que entendamos que, si sabemos muchas cosas como "expertos pescadores", es porque Él nos lo ha enseñado; para que, humildemente, reconozcamos que Él tiene poder porque Él es Dios. Y para que, cuando la pregunta llegue, podamos responder con toda firmeza y con toda certeza: "Señor, tú lo sabes todo; tú bien sabes que te quiero". Y entonces podamos escuchar el tan anhelado: "Sígueme" del Maestro que nos llevará a la gloria y a la paz para la que hemos sido destinados. Por ahora, digamos al mundo, sin miedo: "Es necesario obedecer a Dios antes que a los hombres".
Propósito: Hoy revisaré si yo sí estoy obedeciendo a Dios antes que a los hombres (aborto, eutanasia, identidad de género).
                     ¡ FELIZ DÍA, JESÚS VIVE Y YO LO CREO Y LO PROCLAMO !
                                                                           Domingo. Mayo 5 de 2019

sábado, 4 de mayo de 2019

UN TIEMPITO PARA DIOS Y SU PALABRA


   "...Al atardecer, bajaron sus discípulos a la orilla del mar, y subiendo a una barca, se dirigían al otro lado del mar, a Cafarnaúm. Había ya oscurecido, y Jesús todavía no había venido donde ellos; soplaba un fuerte viento y el mar comenzó a encresparse. Cuando habían remado unos veinticinco o treinta estadios, ven a Jesús que caminaba sobre el mar y se acercaba a la barca, y tuvieron miedo. Pero él les dijo: Soy yo. No temáis. Quisieron recogerle en la barca, pero en seguida la barca tocó tierra en el lugar a donde se dirigían".
                                                         Juan 6, 16-21
      "Soy yo. No temáis", es una expresión que, en boca de Jesús, significa confianza plena en Él.- En este mundo en el que parece que ya "ha oscurecido" y "el mar ha comenzado a encresparse", es cierto que necesitamos en quién apoyar nuestra confianza, si somos conscientes de nuestra debilidad, para poder enfrentar esa mundanidad y ese materialismo que nos rodea y que nos impide avanzar. Necesitamos creer. Pero creer con confianza plena en quien creemos. Creer en su poder y en su misericordia. Entonces podremos enfrentar todas las borrascas que puedan presentarse en nuestra vida, con la esperanza cierta de que saldremos vencedores. "No tengamos miedo", Que también María oyó  del ángel esas palabras y salió triunfante.
Propósito. Hoy, Señor, no tendré miedo porque sé que no estoy solo: estás conmigo.
                        ¡ FELIZ DÍA, JESÚS VIVE Y YO LO CREO Y LO PROCLAMO !
                                                                               Sábado. Mayo 4 de 2019
J. RUIZ 

viernes, 3 de mayo de 2019

UN TIEMPITO PARA DIOS Y SU PALABRA


   "...En aquel tiempo Jesús dijo a Nicodemo: Nadie ha subido al cielo sino el que bajó del cielo, el Hijo del hombre. Y como Moisés levantó la serpiente en el desierto, así tiene que ser levantado el Hijo del hombre, para que todo el que crea tenga por Él vida eterna. Porque tanto amó Dios al mundo que dio a su Hijo único, para que todo el que crea en Él no perezca, sino que tenga vida eterna. Porque Dios no ha enviado a su Hijo al mundo para juzgar al mundo, sino para que el mundo se salve por Él".
                     Juan 3, 13-17
        En esta conversación se narra el acto de amor supremo de Dios para con el hombre: la Crucifixión.- La Cruz es el símbolo de nosotros los cristianos. Pero sólo puede usarse con amor porque si no, no se entendería. Y, además, no seríamos capaces de amar, como Jesús lo ordena, a Dios y a los demás. Así que, mientras más sincera sea nuestra vida de amor, más fácilmente podremos cargar con nuestras propias cruces, porque el amor todo lo hace fácil y soportable y alegre. Vamos, pues, a tratar de que todos nuestros actos estén impregnados de ese sentimiento que implica compasión, perdón y misericordia para con toda la creación y que se llama: Amor. Nuestra vida y la de quienes nos rodean será mucho más productiva, alegre y plena.
Propósito: Hoy mi petición será: Señor, dáme amor para llevar mi cruz y para soportar la de los demás.
                     ¡ FELIZ DÍA, JESÚS VIVE Y YO LO CREO Y LO PROCLAMO !
                                                                            Jueves. Mayo 3 de 2019
J. RUIZ 

jueves, 2 de mayo de 2019

UN TIEMPITO PARA DIOS Y SU PALABRA


   "...Jesús seguía diciendo: El que viene de lo alto está por encima de todos; pero el que viene de la tierra pertenece a la tierra y habla de las cosas de la tierra. El que viene del cielo está por encima de todos. Da testimonio de lo que ha visto y oído, pero nadie acepta su testimonio. El que acepta su testimonio certifica que Dios es veraz. Aquel a quien Dios envió habla las palabras de Dios, porque Dios le ha concedido sin medida su Espíritu. El Padre ama a su Hijo y todo lo ha puesto en sus manos. El que cree en el Hijo tiene vida eterna. Pero el que es rebelde al Hijo no verá la vida, porque la cólera divina perdura en contra de él".
Juan 3, 31-36
      El Evangelio de hoy nos habla de Espiritualidad, que es la característica que nos dice si somos de la tierra o de mucho más allá.-  Si pertenecemos a este mundo con sus trivialidades, con sus injusticias, con sus egoismos, con sus materialismos. O si creemos que hay algo más en esa búsqueda constante en que andamos, que es la que nos da la fuerza necesaria, como a los apóstoles después de la Ascensión de Jesús al cielo, para enfrentarnos a los poderes terrenales proclamando la Vida Nueva y la Tierra Nueva a que tenemos derecho, si vivimos la vida terrena como el Maestro nos lo enseñó, amando a Dios sobre todas las cosas, y al prójimo como a nosotros mismos. Así como nos preocupamos por el bienestar de nuestro cuerpo, debemos estar pendientes de la mejor manera como nuestro espíritu podrá cumplir su misión de elevarnos "por encima de todos, como el que viene del cielo".
Propósito: Hoy procuraré alimentar mi espíritu con la lectura de la Palabra de Dios.
                  ¡ FELIZ DÍA, JESÚS VIVE Y YO LO CREO Y LO PROCLAMO !
                                                                          Jueves. Mayo 2 de 2019
J. RUIZ 

miércoles, 1 de mayo de 2019

UN TIEMPITO PARA DIOS Y SU PALABRA


   "...En aquel tiempo decía Jesús: Tanto amó Dios al mundo, que le entregó a su Hijo único, para que todo el que crea en él no perezca, sino que tenga la vida eterna. Porque Dios no envió a su Hijo para condenar al mundo, sino para que el mundo se salvara por él. El que cree en él no será condenado; pero el que no cree ya está condenado, por no haber creído en el Hijo único de Dios. La causa de la condenación es ésta: habiendo venido la luz al mundo, los hombres prefirieron las tinieblas a la luz, porque sus obras eran malas. Todo aquel que hace el mal, aborrece la luz y no se acerca a ella, para que sus obras no se descubran. En cambio, el que obra el bien conforme a la verdad, se acerca a la luz, para que se vea que sus obras están hechas según Dios".
                                                                                                              Juan 3, 16-21
      Como Jesús, tenemos que ser "Luz del mundo", para iluminar las tinieblas que no nos dejan avanzar.- En este mundo sumido en el abusivo consumo de los bienes de la creación, en la injusticia que se niega a compartir esos mismos bienes, en el egoismo que no le importa pasar sobre otros para satisfacer sus caprichos y deseos, es imperativo que podamos absorber, para poder reflejar, esa luz que es Cristo, La Palabra de Dios. En este mundo, donde parece que ya la verdad sobre el género humano, sobre los valores morales, sobre la vida misma, no existe, es necesario que, como Tomás, pidamos a Jesús que nos deje "meter nuestra mano en su costado" para poder sumergirnos, y comprender, el misterio insondable de su vida, que es la Palabra y la Verdad y la Vida y el Camino. Y así proyectar su Luz incandescente sobre las tinieblas que están a nuestro alrededor.
Propósito: Hoy quiero, Señor, que me permitas ser un rayito de tu Luz Verdadera.
                 ¡ FELIZ DÍA, JESÚS VIVE Y YO LO CREO Y LO PROCLAMO !
                                                                     Miércoles. Mayo 1 de 2019
J. RUIZ