domingo, 31 de marzo de 2013

UN TIEMPITO PARA DIOS Y SU PALABRA

¡Ha resucitado el Señor!
¡Ha resucitado el Señor!
   "...El día después del sábado, María Magdalena fue al sepulcro muy de mañana cuando aún era de noche, y vio que la piedra del sepulcro estaba movida. Echa a correr y llega donde Simón Pedro y donde el otro discípulo a quien Jesús quería y les dice: Se han llevado del sepulcro al Señor, y no sabemos dónde le han puesto. Salieron Pedro y el otro discípulo, y se encaminaron al sepulcro. Corrían los dos juntos, pero el otro discípulo corrió por delante más rápido que Pedro, y llegó primero al sepulcro. Se inclinó y vio las vendas en el suelo; pero no entró. Llega también Simón Pedro siguiéndole, entra en el sepulcro y ve las vendas en el suelo, y el sudario que cubrió su cabeza, no junto a las vendas, sino plegado en un lugar aparte. Entonces entró también el otro discípulo, el que había llegado el primero al sepulcro; vio y creyó".
                                                                          Juan 20, 1-9
                                            ¡ RA, RA. RA, LA MUERTE NO GANÓ !
                                            ¡ RA, RA, RA, LA VIDA YA TRIUNFÓ !
       Hoy comienza una Nueva Creación, una Nueva vida. La vida ha triunfado sobre la muerte y la razón de nuestra fe ha salido victoriosa. A nosotros, así como a los discípulos de Jesús, nos da mucha dificultad creer en su Resurrección. ¿Porqué? Porque no amamos. Dice mucho el hecho de que el discípulo "a quien Jesús quería", al entrar al sepulcro detrás de Pedro, "vio y creyó". Es que amaba y era amado. El amor lo llevó de su mano hacia la fe con cuyos ojos ya pudo "ver" a Jesús Resucitado. Sólo con los ojos del cuerpo no podremos "ver" a Jesús Resucitado. Veremos el sepulcro vacío y el sudario y las vendas ordenadas a su lado, pero no le veremos a Él. Tenemos, pues que amarle de verdad para que nuestros ojos se abran a la fe  que nos permita contemplar su gloria y tener la esperanza de que, si somos sus testigos viviendo su vida, también un día la compartiremos en el Reino que el Padre nos tiene preparado.
Propósito: Hoy renovaré mis promesas bautismales como símbolo de afirmación de mi fe.
                         ¡ FELIZ DÍA, JESÚS VIVE Y YO LO CREO Y LO PROCLAMO !
                                                                          Domingo. Marzo 31 de 2013
J. RUIZ

sábado, 30 de marzo de 2013

UN TIEMPITO PARA DIOS Y SU PALABRA



 
                                                  Silencio en la tierra...
     Homilía antigua sobre el Sábado Santo que la Iglesia lee en la liturgia del Oficio de Lectura«Hoy hay un gran silencio en la tierra. Un gran silencio y soledad. Un gran silencio porque el Rey duerme. La tierra se ha estremecido y se ha quedado inmóvil porque Dios se ha dormido en la carne y ha resucitado a los que dormían desde hace siglos. Dios ha muerto en la carne y ha despertado a los del abismo».
                  Hoy no hay lectura evangélica para comentar. Pero se debería meditar en todo el Evangelio, la Buena Nueva, que esta Semana nos ha estado recordando de manera especial. Acompañando a María sumida en el dolor de tener a su Hijo muerto y sepultado y guardados en su corazón, meditándolos, todos los misterios de las cosas grandes y maravillosas que han ocurrido en su vida y que no ha podido comprender a cabalidad, pero que ha aceptado sin restricción alguna como voluntad del Padre. Ella, en su corazón de madre, está dolida porque Jesús, la luz de su vida "vino a los suyos, y los suyos no la recibieron".
                   No vayamos a hacer eco de algo que hace algunos años se decía: que hoy se podía hacer cualquier cosa, buena o mala, porque Dios estaba muerto y entonces no había forma de pecar. No. Hoy debemos pensar en que seguimos, después de dos mil años, enviando a Jesús a la muerte ignominiosa de la Cruz con nuestras injusticias con los débiles, con la explotación de los desvalidos, con la muerte más que ignominiosa de los que lo hacen por el hambre que causa nuestro egoismo que no nos deja compartir los bienes terrenales que fueron creados para todos y no sólo para unos pocos. Pensemos en ello y en cómo hacer para cambiar esta situación, especialmente ahora que talvez, con nuestro  Papa Francisco y con sus orientaciones, encontremos la manera de hacer realidad la presencia liberadora de Jesús entre nosotros, y poder llegar así con Él a la gloria de su Resurrección gloriosa.
Propósito: Hoy meditaré en la manera como puedo participar de la Nueva Evangelización.
                        ¡ FELIZ DÍA, JESÚS VIVE Y YO LO CREO Y LO PROCLAMO !
                                                                                     Sábado. Marzo 30 de 2013
J. RUIZ

viernes, 29 de marzo de 2013

UN TIEMPITO PARA DIOS Y SU PALABRA

Prisión de Jesús
Crucifixión de Jesús
   "...Dicho esto, pasó Jesús con sus discípulos al otro lado del torrente Cedrón, donde había un huerto, en el que entraron él y sus discípulos. Pero también Judas, el que le entregaba, conocía el sitio, porque Jesús se había reunido allí muchas veces con sus discípulos. Judas, pues, llega allí con la cohorte y los guardias enviados por los sumos sacerdotes y fariseos, con linternas, antorchas y armas. Jesús, que sabía todo lo que le iba a suceder, se adelanta y les pregunta: ¿A quién buscáis? Le contestaron: A Jesús el Nazareno. Díceles: Yo soy. Judas, el que le entregaba, estaba también con ellos. Cuando les dijo: Yo soy, retrocedieron y cayeron en tierra. Les preguntó de nuevo: ¿A quién buscáis? Le contestaron: A Jesús el Nazareno. Respondió Jesús: Ya os he dicho que yo soy; así que si me buscáis a mí, dejad marchar a éstos. Así se cumpliría lo que había dicho: De los que me has dado, no he perdido a ninguno. Entonces Simón Pedro, que llevaba una espada, la sacó e hirió al siervo del Sumo Sacerdote, y le cortó la oreja derecha. El siervo se llamaba Malco. Jesús dijo a Pedro: Vuelve la espada a la vaina. La copa que me ha dado el Padre, ¿no la voy a beber? Entonces la cohorte, el tribuno y los guardias de los judíos prendieron a Jesús, le ataron y le llevaron primero a casa de Anás, pues era suero de Caifás, el Sumo Sacerdote de aquel año. Caifás era el que aconsejó a los judíos que convenía que muriera un solo hombre por el pueblo. Seguían a Jesús Simón Pedro y otro discípulo. Este discípulo era conocido del Sumo Sacerdote y entró con Jesús en el atrio del Sumo Sacerdote, mientras Pedro se quedaba fuera, junto a la puerta. Entonces salió el otro discípulo, el conocido del Sumo Sacerdote, habló a la portera e hizo pasar a Pedro. La muchacha portera dice a Pedro: ¿No eres tú también de los discípulos de ese hombre? Dice él: No lo soy. Los siervos y los guardias tenían unas brasas encendidas porque hacía frío, y se calentaban. También Pedro estaba con ellos calentándose. El Sumo Sacerdote interrogó a Jesús sobre sus discípulos y su doctrina..."
                                     Juan 18, 1--19, 42
       Hoy, con su muerte en la Cruz, cumple Jesús la decisión que había tomado libremente de ser fiel al Padre hasta el final. Esa decisión le hizo abrazar el Proyecto del Padre y le dio la voluntad firme de realizarlo plenamente, manteniéndose en el amor sin medida a nosotros, sus amigos y hermanos, hasta llegar al sacrificio de su propia vida para rescatarnos e iluminar con la luz radiante que, desde la cima del Calvario, se extendió por el mundo de ayer, de hoy y de siempre, rompiendo las tinieblas con que la injusticia ha ensombrecido la vida de todos los pobres y excluídos. Hoy, en medio de la tristeza que embarga al universo por esta conmemoración, tomemos la firme decisión de corresponder a ese amor, pidiéndole a Dios la fuerza necesaria para ser su testigo, para denunciar las injusticias contra los oprimidos, y servir y amar a los demás como si de Él mismo se tratara, dando así cumplimiento a su mandamiento supremo: "Amaos los unos a los otros como yo os he amado".
Propósito: Hoy tomaré mi cruz con fe y con alegría: sé que estoy en buena compañía.
                    ¡ FELIZ DÍA, JESÚS VIVE Y YO LO CREO Y LO PROCLAMO !
                                                                     Viernes. Marzo 29 de 2013
J. RUIZ                                                                                                                                                                                                        

jueves, 28 de marzo de 2013

UN TIEMPITO PARA DIOS Y SU PALABRA

Lavatorio de los pies
Lavatorio de los pies
   "...Antes de la fiesta de la Pascua, sabiendo Jesús que había llegado su hora de pasar de este mundo al Padre, habiendo amado a los suyos que estaban en el mundo, los amó hasta el extremo. Durante la cena, cuando ya el diablo había puesto en el corazón a Judas Iscariote, hijo de Simón, el propósito de entregarle, sabiendo que el Padre le había puesto todo en sus manos y que había salido de Dios y a Dios volvía, se levanta de la mesa, se quita sus vestidos y, tomando una toalla, se la ciñó. Luego echa agua en un lebrillo y se puso a lavar los pies de los discípulos y a secárselos con la toalla con que estaba ceñido. Llega a Simón Pedro; éste le dice: Señor, ¿tú lavarme a mí los pies? Jesús le respondió: Lo que yo hago, tú no lo entiendes ahora: lo comprenderás más tarde. Le dice Pedro: No me lavarás los pies jamás. Jesús le respondió: Si no te lavo, no tienes parte conmigo. Le dice Simón Pedro: Señor, no sólo los pies, sino hasta las manos y la cabeza. Jesús le dice: El que se ha bañado, no necesita lavarse; está del todo limpio. Y vosotros estáis limpios, aunque no todos. Sabía quién le iba a entregar, y por eso dijo: No estáis limpios todos. Después que les lavó los pies, tomó sus vestidos, volvió a la mesa, y les dijo: ¿Comprendéis lo que he hecho con vosotros? Vosotros me llamáis el Maestro y el Señor, y decís bien, porque lo soy. Pues si yo, el Señor y el Maestro, os he lavado los pies, vosotros también debéis lavaros los pies unos a otros. Porque os he dado ejemplo, para que también vosotros hagáis como yo he hecho con vosotros".
                                                                                                        Juan 13, 1-15
       Comienzan los tres días principales de la Semana Santa con la conmemoración de la institución de la Sagrada Eucaristía y el Lavatorio de los pies: Amor y Servicio. Jesús toma algunos elementos de la Pascua judía en la celebración de la Última Cena, pero les da un nuevo significad. Los judíos tienen presente los 40 años de peregrinaje por el desierto, para Jesús es el símbolo de la Nueva Alianza. El pan y el vino, partido y compartidos, es la invención de su amor para perpetuarse entre nosotros en una vida de verdadera comunión: es el Cordero Pascual que asume nuestras culpas para redimirnos de ellas, devolviéndonos así la libertad perdida para encontrar la vida eterna. El amor a los demás debe ser el signo del cristiano. Y el servicio unos a otros es la manera como se gobierna en el Reino predicado por Jesús con su vida y su testimonio. Y la Iglesia, ya lo recordó el Papa Francisco, no es cuestión de política, sino de servicio.
Propósito: Hoy, y en adelante, procuraré ser más servicial con todos.
                         ¡ FELIZ DÍA, JESÚS VIVE Y YO LO CREO Y LO PROCLAMO !
                                                                          Jueves. Marzo 28 de 2013
J. RUIZ                                                                                                                                                             

miércoles, 27 de marzo de 2013

UN TIEMPITO PARA DIOS Y SU PALABRA

La traición de Judas
La traición de Judas
   "...Entonces uno de los Doce, llamado Judas Iscariote, fue donde los sumos sacerdotes, y les dijo: ¿Qué queréis darme, y yo os lo entregaré? Ellos le asignaron treinta monedas de plata. Y desde ese momento andaba buscando una oportunidad para entregarle. El primer día de los Ázimos, los discípulos se acercaron a Jesús y le dijeron: ¿Dónde quieres que te hagamos los preparativos para comer el cordero de Pascua? El les dijo: Id a la ciudad, a casa de fulano, y decidle: El Maestro dice: Mi tiempo está cerca; en tu casa voy a celebrar la Pascua con mis discípulos. Los discípulos hicieron lo que Jesús les había mandado, y prepararon la Pascua. Al atardecer, se puso a la mesa con los Doce. Y mientras comían, dijo: Yo os aseguro que uno de vosotros me entregará. Muy entristecidos, se pusieron a decirle uno por uno: ¿Acaso soy yo, Señor? El respondió: El que ha mojado conmigo la mano en el plato, ése me entregará. El Hijo del hombre se va, como está escrito de él, pero ¡ay de aquel por quien el Hijo del hombre es entregado! ¡Más le valdría a ese hombre no haber nacido! Entonces preguntó Judas, el que iba a entregarle: ¿Soy yo acaso, Rabbí? Dícele: Sí, tú lo has dicho".
                                                                                        Mateo 26, 14-25
       Uno de los dolores grandes que se pueda tener en la vida es conocer la traición de un amigo. Debió ser mucho el sentimiento de Jesús al saber las vueltas en que andaba Judas, uno de los doce escogidos, para entregarle a sus enemigos, los sumos sacerdotes. Casi tres años estuvo compartiendo con él su alimento, su Palabra, su vida, y sin embargo, Judas no pudo llegar a amarlo. Como zelote que probablemente era, esperaba un Mesías muy distinto: poderoso, triunfante, que acabara con el poderío del imperio Romano que los tenía sojuzgados, y no creía que con las ideas de la compasión, la misericordia y el perdón, como predicaba el Maestro, se llegara a ninguna parte. En cierta forma se sentía traicionado por Jesús, por haber puesto sus esperanzas en Él. Por eso su decisión de vengarse poniéndolo en manos de sus perseguidores. También nosotros traicionamos a Jesús, nuestro hermano, cuando faltamos a esa doctrina del amor que nos pide no ser injustos con los demás y acoger y ayudar a quienes lo necesitan. Pensemos mucho en ello en esta Semana de Pasión y pidámosle ayuda al Padre para no traicionarle, sino, por el contrario, comprender mejor cada día ese Reino de amor y de justicia, que es el Reino de Dios.
Propósito: Hoy buscaré una lectura referente a la amistad para ver de reforzar ese sentimiento hacia Dios y hacia los demás.
                        ¡ FELIZ DÍA, JESÚS VIVE Y YO LO CREO Y LO PROCLAMO !
                                                                         Miércoles. Marzo 27 de 2013
J. RUIZ

martes, 26 de marzo de 2013

EL PAPA FRANCISCO


El Papa que paga sus cuentas 

2013-03-25


Lo que convence a las personas no son las prédicas sino las prácticas. Las ideas pueden iluminar, pero los ejemplos son los que atraen y nos ponen en marcha. Los ejemplos los entiende todo el mundo. Muchas explicaciones confunden más que aclaran. Las prácticas hablan por sí solas.
Lo que ha marcado al nuevo Papa Francisco, ese «que viene del fin del mundo», es decir, fuera de los marcos europeos tan cargados de tradiciones, palacios, espectáculos principescos y disputas internas de poder, son gestos simples, populares, obvios para quien da valor al buen sentido común de la vida. Él está rompiendo los protocolos y mostrando que el poder es siempre una máscara y un teatro, como bien puntualizó el sociólogo Peter Berger, aunque se trate de un poder pretendidamente de origen divino.
El Papa Francisco simplemente obedece al mandato de Jesús que explícitamente dijo que los grandes de este mundo mandan y dominan pero “con vosotros no debe ser así; quien quiera ser grande, que sea servidor; quien quiera ser el primero, que sea siervo de todos; pues el Hijo del Hombre no vino para ser servido sino para servir” (Mc 10,43-45). Bien, si Jesús dijo eso, ¿cómo puede el Papa, garante de su mensaje, obrar de otra manera?
Ciertamente con el establecimiento de la monarquía absoluta de los papas, especialmente a partir del segundo milenio, la institución eclesiástica heredó los símbolos del poder imperial romano y de la nobleza feudal: ropas vistosas (como las de los cardenales), oropeles, cruces y anillos de oro y plata y hábitos de palacio. En los grandes conventos religiosos que vienen de la Edad Media se vivía en espacios palaciegos.
En el cuarto en el que me hospedaba, como estudiante, en el convento franciscano de Múnich, que remonta al tiempo de Guillermo de Ockham (siglo XIV), un solo cuadro renacentista de la pared valía algunos miles de euros. ¿Cómo conjugar la pobreza del Nazareno que no tenía donde reposar su cabeza con las mitras, los báculos dorados y las estolas y ropas principescas de los prelados actuales? Honestamente no es posible. Y el pueblo que no es ignorante, sino fino observador, nota esta contradicción. Todo este aparato no tiene nada que ver con la Tradición de Jesús y de los Apóstoles.
Según algunos periódicos, cuando el secretario del Cónclave quiso poner sobre los hombros del Papa Francisco la «muceta», esa capita ricamente adornada, símbolo del poder papal, se limitó a decir: “El carnaval acabó, guarde esta ropa". Y apareció vestido de blanco, como también acostumbraba a vestir dom Helder Câmara, que dejó el palacio colonial de Olinda y fue a vivir bajo un tejado de media agua en la iglesia de las Candelas, en la periferia; como también hizo el cardenal dom Paulo Evaristo Arns, por no hablar de dom Pedro Casaldáliga que vive en una casita pobre, compartiendo el cuarto con algún huésped.
Para mí el gesto más simple, honesto y popular del Papa Francisco fue ir a la residencia donde se había alojado (nunca se alojaba en la grande casa central de los jesuitas en Roma) a pagar la cuenta a razón de 90 euros por día. Entró y él mismo fue a buscar su ropa, hizo su maleta, saludó al personal y se fue. ¿Qué potentado civil, qué opulento millonario, qué famoso artista haría tal cosa? Sería falsear la intención del obispo de Roma querer ver en este gesto, normal para todos nosotros mortales, una intención populista.
¿No hacía lo mismo cuando era cardenal de Buenos Aires e iba a buscar el periódico, hacia la compra, viajaba en metro o en autobús y prefería presentarse como «padre Bergoglio»?
Frei Betto acuñó una expresión que es una gran verdad: «la cabeza piensa desde donde pisan los pies». Efectivamente, si alguien pisa siempre palacios y suntuosas catedrales, acaba pensando según la lógica de los palacios y de las catedrales. Por esta razón, el domingo celebró misa en la capilla de Santa Ana, dentro del Vaticano, que es considerada la parroquia romana del Papa. Y después salió a saludar a los fieles a la puerta.
Cosa notable y cargada de contenido teológico: no se presentó como Papa, sino como «obispo de Roma». Pidió oraciones no para el Papa emérito Benedicto XVI, sino para el obispo emérito de Roma, Joseph Ratzinger. Con esto retomó la más primordial tradición de la Iglesia, la de considerar al obispo de Roma «el primero entre sus pares». Por estar Pedro y Pablo sepultados en ella, adquirió especial preeminencia. Pero ese poder simbólico y espiritual era ejercido en el estilo de la caridad y no en forma de poder jurídico sobre las demás Iglesias, como predominó en el segundo milenio. No me admiraría en absoluto si, como quería Juan Pablo I, resolviese abandonar el Vaticano y fuera a vivir a un sitio sencillo, con un amplio espacio exterior para recibir la visita de los fieles. Los tiempos están maduros para este tipo de revolución en las costumbres papales. Y qué desafío está representando para los demás prelados de la Iglesia vivir la sencillez voluntaria y la sobriedad compartida.  

Leonardo Boff  
                                                                                           Bajado por: J. RUIZ    



UN TIEMPITO PARA DIOS Y SU PALABRA

Anuncio de la traición
Anuncio de la traición
   "...Cuando dijo estas palabras, Jesús se turbó en su interior y declaró: En verdad, en verdad os digo que uno de vosotros me entregará. Los discípulos se miraban unos a otros, sin saber de quién hablaba. Uno de sus discípulos, el que Jesús amaba, estaba a la mesa al lado de Jesús. Simón Pedro le hace una seña y le dice: Pregúntale de quién está hablando. El, recostándose sobre el pecho de Jesús, le dice: Señor, ¿quién es? Le responde Jesús: Es aquel a quien dé el bocado que voy a mojar. Y, mojando el bocado, le toma y se lo da a Judas, hijo de Simón Iscariote. Y entonces, tras el bocado, entró en él Satanás. Jesús le dice: Lo que vas a hacer, hazlo pronto. Pero ninguno de los comensales entendió por qué se lo decía. Como Judas tenía la bolsa, algunos pensaban que Jesús quería decirle: Compra lo que nos hace falta para la fiesta, o que diera algo a los pobres. En cuanto tomó Judas el bocado, salió. Era de noche. Cuando salió, dice Jesús: Ahora ha sido glorificado el Hijo del hombre y Dios ha sido glorificado en él. Si Dios ha sido glorificado en él, Dios también le glorificará en sí mismo y le glorificará pronto. Hijos míos, ya poco tiempo voy a estar con vosotros. Vosotros me buscaréis, y, lo mismo que les dije a los judíos, que adonde yo voy, vosotros no podéis venir, os digo también ahora a vosotros. Simón Pedro le dice: Señor, ¿a dónde vas? Jesús le respondió: Adonde yo voy no puedes seguirme ahora; me seguirás más tarde. Pedro le dice: ¿Por qué no puedo seguirte ahora? Yo daré mi vida por ti. Le responde Jesús: ¿Que darás tu vida por mí? En verdad, en verdad te digo: no cantará el gallo antes que tú me hayas negado tres veces".
                                                                                    Juan 13, 21-33.36-38
       Ha llegado al fin la hora. Y la hora comienza con la traición de Judas. Cuando él sale de donde el Señor se despedía con una comida, dice el Evangelio, "era de noche". Siempre es de noche cuando nos alejamos de Jesús y cuando, como Judas, la soberbia nos hace creer que somos capaces de independizarnos de Dios, que no lo necesitamos para salir adelante, que podemos vivir sin su amor: eso es el pecado. Entonces estaremos perdidos como Judas. Pero Pedro también pecó, también se alejó de Jesús cuando, un poco más adelante, lo negó tres veces. Mas él, inmediatamente, reconociendo su cobardía y su debilidad, lloró arrepentido lágrimas amargas que arrancaron la compasión y la misericordia infinitas del Padre Bueno, quien siempre dejará que "el ladrón" entre a su Reino siempre y cuando, con humildad, se arrepienta, se convierta y repare el mal que hizo. Dios es amor compasivo y misericordioso. De nuestra parte sólo necesitamos un poco de humildad, y estaremos salvados.
Propósito: Hoy reconoceré mi debilidad que me lleva a serle infiel a Jesús y pediré su ayuda para hacerme fuerte.
                 ¡ FELIZ DÍA, JESÚS VIVE Y YO LO CREO Y LO PROCLAMO !
                                                                  Martes. Marzo 26 de 2013
J. RUIZ                                                                                                                                                                     

lunes, 25 de marzo de 2013

LEAMOS LA BIBLIA


¿Cómo leer adecuadamente la Biblia?
Lectio Divina.

Pasos de la Lectio Divina Complementados con las indicaciones de la Pequeña 
Pedagogía para Meditar la Palabra del P. Ignacio Larrañaga.




1. LEER «Desconocer la Escritura es desconocer a Cristo» (San Jerónimo)
* Qué dice el texto bíblico?

Leer de forma constante y continua, perseverante y diaria, Descubrir lo que Dios
nos dice en la palabra, de forma desinteresada, es decir sin pretender buscar 
verdades, soluciones o doctrinas. Escuchar a Dios que nos habla por intermedio 
del autor sagrado de una manera receptiva y serena sin pretender necesariamente 
entender intelectualmente todo lo leido.

2. MEDITAR «María custodiaba estas cosas rumiándolas en su corazón» (Lc 2,19)
* Qué me dice el texto a mí, a nosotros?

Repitiendo el texto, "rumiándolo", masticándolo y transformando nuestra persona. 
En este proceso es el Espíritu, presente en la Palabra, el que obra esa 
transformación.
Si en un momento dado no se logra esclarecer el significado de algo de lo leído  
seguir adelante libremente y no estancarse. Conviene en determinados casos 
cuando habla el Señor, reemplazar los nombres propios de la Biblia 
(Israel, Jacob, Tomás...) con el nombre propio del lector. De este modo, se 
percibe el amor de Dios cuando les habló.

3. ORAR CON LA PALABRA «El Espíritu viene en ayuda de nuestra debilidad, 
pues nosotros no sabemos pedir como conviene (Rom 8,26)
* Qué le decimos a Dios motivados por su palabra?

En este momento dedicado a la oración, el creyente dialoga con Dios, movido 
por el Espíritu, celebrando su fe. Los Salmos fueron escritos para orar, suplicar y 
para alabar a Dios, y no para lectura, puede ser útil acogerse a las expresiones 
de los salmistas e identificarse con sus angustias y sus frases de alabanza.

4. CONTEMPLAR/VIVENCIAR «No son los que me dicen: “Señor, Señor", los que
entrarán en el Reino de los ... sino los que cumplen la voluntad de mi Padre”»
(Mt.7,21)
* A que acciones nos invita el Señor?

Conducir la vida según los criterios de Dios. Procurar obrar como lo haría Jesús, 
practicar principalmente la misericordia.

                                                                          J. RUIZ

UN TIEMPITO PARA DIOS Y SU PALABRA

La unción en Betania
    "...Seis días antes de la Pascua, Jesús se fue a Betania, donde estaba Lázaro, a quien Jesús había resucitado de entre los muertos. Le dieron allí una cena. Marta servía y Lázaro era uno de los que estaban con él a la mesa. Entonces María, tomando una libra de perfume de nardo puro, muy caro, ungió los pies de Jesús y los secó con sus cabellos. Y la casa se llenó del olor del perfume. Dice Judas Iscariote, uno de los discípulos, el que lo había de entregar: ¿Por qué no se ha vendido este perfume por trescientos denarios y se ha dado a los pobres? Pero no decía esto porque le preocuparan los pobres, sino porque era ladrón, y como tenía la bolsa, se llevaba lo que echaban en ella. Jesús dijo: Déjala, que lo guarde para el día de mi sepultura. Porque pobres siempre tendréis con vosotros; pero a mí no siempre tendréis. Gran número de judíos supieron que Jesús estaba allí y fueron, no sólo por Jesús, sino también por ver a Lázaro, a quien había resucitado de entre los muertos. Los sumos sacerdotes decidieron dar muerte también a Lázaro, porque a causa de él muchos judíos se les iban y creían en Jesús. 
                                                                                                      Juan 12, 1-11 
        El gesto de María con Jesús fue un gran signo de amor. Y, como todas las señales de amor, sólo son comprendidas por los que las realizan. En estos días previos a  la conmemoración de la Pasión y muerte de Nuestro Señor, las lecturas diarias nos van preparando para comprender mejor aquellos acontecimientos dolorosos, pero que fueron causados por el amor inmenso de Jesús hacia nosotros, y nos llevan hasta la gloria de la Resurrección, celebrada el próximo domingo. Todo lo que ocurra, pues, esta semana, debería estar impregnado de amor que nos haga ver de veras a los demás como a nuestros hermanos y nos haga sentir compasión del más necesitado y nos haga protestar, denunciar y luchar por implantar la paz y la justicia entre nosotros, ya que en esto consiste el Reino de Dios.
Propósito: Hoy continuaré leyendo y meditando la Pasión de Jesús en la Sagrada Biblia.
                    ¡ FELIZ DÍA, JESÚS VIVE Y YO LO CREO Y LO PROCLAMO !
                                                                         Lunes. Marzo 25 de 2013
J. RUIZ                                                                                                                                                                                                      

domingo, 24 de marzo de 2013

UN TIEMPITO PARA DIOS Y SU PALABRA



Jesús celebra la Pascua con sus discípulos
Jesús celebra la Pascua con sus discípulos
   "...Cuando llegó la hora, se puso a la mesa con los apóstoles; y les dijo: Con ansia he deseado comer esta Pascua con vosotros antes de padecer; porque os digo que ya no la comeré más hasta que halle su cumplimiento en el Reino de Dios. Y recibiendo una copa, dadas las gracias, dijo: Tomad esto y repartidlo entre vosotros; porque os digo que, a partir de este momento, no beberé del producto de la vid hasta que llegue el Reino de Dios. Tomó luego pan, y, dadas las gracias, lo partió y se lo dio diciendo: Este es mi cuerpo que es entregado por vosotros; haced esto en recuerdo mío. De igual modo, después de cenar, la copa, diciendo: Esta copa es la Nueva Alianza en mi sangre, que es derramada por vosotros. Pero la mano del que me entrega está aquí conmigo sobre la mesa. Porque el Hijo del hombre se marcha según está determinado. Pero, ¡ay de aquel por quien es entregado! Entonces se pusieron a discutir entre sí quién de ellos sería el que iba a hacer aquello..."
                                                                                               Lucas 22, 14--23, 56
        La narración de la Pasión de Nuestro Señor Jesucristo que nos trae hoy la Iglesia en el Evangelio de Lucas, tiene tres momentos culminantes: La comida de despedida de sus amigos con la institución de la Sagrada Eucaristía, la entrada entre aplausos y batir de palmas en Jerusalén y la crucifixión y muerte terribles de Jesús en el Calvario. Es como un recorderis y un resumen del gran misterio de amor que fue la vida terrena de Jesús: vivió compartiendo con todos, especialmente con los pobres y desposeídos, sirviéndoles y haciendo el bien, y se inventa la forma de quedarse entre nosotros hasta el fin de los tiempos; su entrada en Jerusalén, aclamado por ese pueblo al que ha amado y servido todo el tiempo, nos muestra una manera distinta de reinar, no con el poder político o de las armas, sino con los lazos irrompibles del amor compasivo y misericordioso; y su muerte, cruel y descarnada, en la cima del Calvario, nos recuerda de manera imborrable, la inmensidad de ese amor que todo lo soportó por nosotros. Que las celebraciones de esta Semana Santa nos lleven a una mejor comprensión de los hechos que tuvieron lugar hace ya más de dos mil años, y que esta comprensión nos acerque a una verdadera conversión interior y que se manifieste en un cambio positivo de vida al servicio de Dios y de los demás.
Propósito: En esta Semana Mayor leeré atentamente las narraciones evangélicas de la Pasión del Señor.
                         ¡ FELIZ DÍA, JESÚS VIVE Y YO LO CREO Y LO PROCLAMO !
                                                        Domingo de Ramos. Marzo 24 de 2013                                                                                                                               

sábado, 23 de marzo de 2013

UN TIEMPITO PARA DIOS Y SU PALABRA


Conviene que uno muera por todos
Conviene que uno muera por todos
   "...Muchos de los judíos que habían venido a casa de María, viendo lo que había hecho, creyeron en él. Pero algunos de ellos fueron donde los fariseos y les contaron lo que había hecho Jesús. Entonces los sumos sacerdotes y los fariseos convocaron consejo y decían: ¿Qué hacemos? Porque este hombre realiza muchas señales. Si le dejamos que siga así, todos creerán en él y vendrán los romanos y destruirán nuestro Lugar Santo y nuestra nación. Pero uno de ellos, Caifás, que era el Sumo Sacerdote de aquel año, les dijo: Vosotros no sabéis nada, ni caéis en la cuenta que os conviene que muera uno solo por el pueblo y no perezca toda la nación. Esto no lo dijo por su propia cuenta, sino que, como era Sumo Sacerdote aquel año, profetizó que Jesús iba a morir por la nación - y no sólo por la nación, sino también para reunir en uno a los hijos de Dios que estaban dispersos. Desde este día, decidieron darle muerte. Por eso Jesús no andaba a en público entre los judíos, sino que se retiró de allí a la región cercana al desierto, a una ciudad llamada Efraím, y allí residía con sus discípulos. Estaba cerca la Pascua de los judíos, y muchos del país habían subido a Jerusalén, antes de la Pascua para purificarse. Buscaban a Jesús y se decían unos a otros estando en el Templo: ¿Qué os parece? ¿Que no vendrá a la fiesta?"
                                                                                                     Juan 11, 45-56
      Los sacerdotes y los fariseos ya le quieren meter política al asunto de Jesús y dicen que si Él sigue así, alebrestando al pueblo, van a venir los romanos y van a destruirlos. Pero como ya nos lo recordó nuestro nuevo Papa Francisco, "la religión no es cuestión de política, sino de servicio". Y, además, no es tan cierto que las preocupaciones de los fariseos y de los hombres de la Ley fueran realmente esas. Lo que pasa es que estaban temerosos de que, si Jesús continuaba predicando su doctrina de amor, de compasión y de misericordia, se iba a despertar en el pueblo una conciencia de rebelión contra las injusticias de la Ley y la explotación a que estaban sometidos, que podría, muy seguramente, tocar sus intereses. Hoy sigue ocurriendo exactamente lo mismo: al que quiere seguir a Jesús y vive y predica su discurso de compasión, misericordia y servicio, se lo persigue también, porque esas ideas no producen dividendos ni prebendas tangibles, medibles o cuantificables en términos terrenales. Pidamos al Señor la fuerza para luchar contra esa actitud sin olvidar nunca que Él estará con nosotros hasta el fin de los tiempos.
Propósito: Hoy pediré en mis oraciones la ayuda del Padre para oponerme a cualquier injusticia de que tenga noticia.
                      ¡ FELIZ DÍA, JESÚS VIVE Y YO LO CREO Y LO PROCLAMO !
                                                                       Sábado. Marzo 23 de 2013
J. RUIZ

viernes, 22 de marzo de 2013

UN TIEMPITO PARA DIOS Y SU PALABRA


Yo soy Hijo de Dios
   El Padre está en mí y yo en Él "...Los judíos tomaron piedras para apedrearlo. Entonces Jesús dijo: Les hice ver muchas obras buenas que vienen del Padre; ¿Por cuál de ellas me quieren apedrear?. Los judíos le respondieron: No queremos apedrearte por ninguna obra buena, sino porque blasfemas, ya que, siendo hombre, te haces DiosJesús les respondió: ¿No está escrito en la Ley: Yo dije: Ustedes son dioses? Si la Ley llama dioses a los que Dios dirigió su Palabra -y la Escritura no puede ser anulada- ¿Cómo dicen: Tú blasfemas, a quien el Padre santificó y envió al mundo, porque dijo: Yo soy Hijo de Dios? Si no hago las obras de mi Padre, no me crean; pero si las hago, crean en las obras, aunque no me crean a mí. Así reconocerán y sabrán que el Padre está en mí y yo en el Padre. Ellos intentaron nuevamente detenerlo, pero el se les escapó de las manos. Jesús volvió a ir al otro lado del Jordán, al lugar donde Juan había bautizado, y se quedó allí. Muchos fueron a verlo, y la gente decía: Juan no ha hecho ningún signo, pero todo lo que dijo de este hombre era verdad. Y en ese lugar muchos creyeron en él".
                                     Juan 10, 31-42 
Ni siquiera siendo testigos diariamente de las grandes y maravillosas obras con que Jesús nos regala permanentemente nos resolvemos a creer que es el Hijo de Dios, quien está en Él y lo hace igual a Él. Lo que pasa realmente es que su vida y sus Palabras nos muestran un proyecto de vida de amor y de servicio, distinto al que queremos en este mundo de individualismo y de materialismo, regido por el egoismo que nos lleva a no querer sino lo que, de alguna manera, nos satisface y nos complace, olvidándonos de los demás o, a veces, pasando por encima de ellos. Por eso los judíos de entonces no creían a Jesús y por eso tantas personas aun hoy no le creen y, como en aquel tiempo, también hoy le persiguen y persiguen a los que nos atrevemos a seguirle. Pero recordemos que muchas veces nos dijo esas palabras reconfortantes "No temáis", "Yo estaré con vosotros hasta el final de los tiempos", y sigamos adelante porque, como dijo Don Alonso Quijano, "Si ladran, Sancho, es porque cabalgamos".
Propósito: Hoy procuraré vivir de acuerdo con mis principios.
                     ¡ FELIZ DÍA, JESÚS VIVE Y YO LO CREO Y LO PROCLAMO !
                                                                          Viernes. Marzo 22 de 2013    
J. RUIZ                                                                                                                                      

jueves, 21 de marzo de 2013

UN TIEMPITO PARA DIOS Y SU PALABRA

Es mi Padre quien me glorifica
Es mi Padre quien me glorifica
   "...En aquel tiempo dijo Jesús a los judíos: Os aseguro que quien guarda mi Palabra, no verá la muerte jamás. Le dijeron los judíos: Ahora estamos seguros de que tienes un demonio. Abraham murió, y también los profetas; y tú dices: Si alguno guarda mi Palabra, no probará la muerte jamás. ¿Eres tú acaso más grande que nuestro padre Abraham, que murió? También los profetas murieron. ¿Por quién te tienes a ti mismo? Jesús respondió: Si yo me glorificara a mí mismo, mi gloria no valdría nada; es mi Padre quien me glorifica, de quien vosotros decís: Él es nuestro Dios, y sin embargo no le conocéis, yo sí que le conozco, y si dijera que no le conozco, sería un mentiroso como vosotros. Pero yo le conozco, y guardo su Palabra. Vuestro padre Abraham se regocijó pensando en ver mi Día; lo vio y se alegró. Entonces los judíos le dijeron: ¿Aún no tienes cincuenta años y has visto a Abraham? Jesús les respondió: En verdad, en verdad os digo: antes de que Abraham existiera, Yo Soy.Entonces tomaron piedras para tirárselas; pero Jesús se ocultó y salió del Templo".
                                                                                                                                        Juan 8, 51-59
       Jesús acusa a los judíos de que no conocen a aquel de quien dicen es su Dios. Y esa acusación puede ser también para nosotros pues, si de verdad le conociéramos, no viviríamos de la manera tan despreocupada como lo hacemos, pensando sólo egoistamente en cómo hacer para acceder a todo lo que nos cause placer y comodidad, sin tener en cuenta para nada las Palabras de Jesús que nos trae la Buena Noticia de que el Reino de Dios ya está entre nosotros y que, si queremos pertenecer a Él, tenemos que vivir esa Palabra, tenemos que vivirle a Él, buscándole y hallándole en los rostros cansados de los desposeídos, de los afligidos y de los excluídos de la tierra. Y, si le conocemos verdaderamente, esto no será tan difícil, porque él, nuestro Padre Bueno, es Amor, compasivo y misericordioso. Y la mejor manera de conocerlo es leyendo, en la Sagrada Biblia, sus Palabras y sus actuaciones a lo largo de la historia. Ese sería un muy buen propósito para tomar en esta Cuaresma: aumentar nuestro tiempo de lectura y estudio de las Sagradas Escrituras, con la seguridad de que traerá grandes beneficios para nuestra vida espiritual.
Propósito: Hoy pediré al Señor su ayuda para conocerle mejor y así acrecentar mi amor a Él y a los demás.
                          ¡ FELIZ DÍA, JESÚS VIVE Y YO LO CREO Y LO PROCLAMO !
                                                                           Jueves. Marzo 21 de 2013
J. RUIZ                                                                                         

miércoles, 20 de marzo de 2013

EL MENOS COMÚN DE LO SENTIDOS

El Sentido Común

Cuando Dios crea al hombre, lo crea a su imagen y semejanza y, a través de la nariz, le insufla su espíritu.

Pero insuflar su espíritu, tener el espíritu de Dios, significa tener una conexión permanente con Él.

Nada se mueve en el universo sin la voluntad de Dios. Una hoja no cae del árbol sin la voluntad de Dios. Como seres humanos, no somos seres individuales, somos seres interrelacionados, interdependientes, pertenecientes a un todo. Cuando Dios nos crea, no nos crea y nos abandona y nos deja solos con nuestro libre albedrío para que hagamos lo que queramos hacer, sino que también nos deja una conexión, por medio de la cual estamos de forma permanente conectados con Él. Esta conexión se llama Conciencia.

La Conciencia que es algo concreto se ubica en un espacio, dentro, en lo más profundo de nuestro corazón.

Esa conciencia es la inteligencia espiritual del hombre, y es lo que le permite a éste, saber cuáles son las decisiones adecuadas, lógicas, naturales y fundamentales que debe tomar, a lo largo de su vida.

Dios nos da esa conciencia y también nos da el libre albedrío para que podamos experimentar la consecuencia de nuestras acciones, para que de esta forma podamos valorar el Ser y el No Ser de la cosas.

En teoría sabemos el camino que debemos seguir en nuestra vida. Las decisiones que tomamos al respecto afectan, de forma positiva o negativa, nuestro caminar por este mundo y nos permiten experimentar la consecuencia de nuestros actos, la consecuencia de nuestras decisiones, para poder experimentar el Ser y No Ser de las mismas.

La conciencia es como el motor de un vehículo; el motor es guiado por un volante que toma las decisiones hacia dónde se debe de ir. El operador de la conciencia, el que le dice hacia dónde debe de ir es...El Sentido Común.

Pero entre el motor y el volante existe una barrera: el cristal o parabrisas que presenta y evidencia la realidad; en el caso del hombre se llama inteligencia racional y se ubica entre la Conciencia y el Sentido Común. Los que tiene ese cristal lo suficientemente limpio pueden ver con sencillez y saben cuáles son las cosas verdaderamente importantes de la vida.

Esta cualidad la tienen los niños y por eso dijo Jesús: "dejad que los niños se acerquen a mí" y "los que no sean como niños no entrarán en el reino de los cielos." Porque solo los que son así: sencillos de corazón, sin complicaciones, sin vidas rebuscadas, serán los que tendrán la posibilidad, por su sencillez, de ver a Dios.

El Demonio, ha buscado complicar tanto la vida del hombre, que ha conseguido ensuciar su cristal, esa inteligencia racional que tenemos. Y por eso el hombre ha perdido el norte de su existencia. Ha perdido, en su mayoría, la capacidad de ver las cosas con sencillez, de saber lo que está bien y lo que está mal en la vida, y ha desarrollado la capacidad, para justificar cualquier irracionalidad que pueda cometer.

El hombre de corazón limpio y sencillo tiene la capacidad de tomar las decisiones fundamentales adecuadas que rigen el destino de su vida.

El Misionerismo surge ÚNICA Y EXCLUSIVAMENTE de la profunda reflexión basada en el sentido común, con fundamento trascendental, sobre el sentido de la vida, sobre la reflexión de nuestro actuar día a día, sobre la visión del futuro del mundo por el camino que se encuentra actualmente, y sobre todo de la profunda reflexión basada también en el sentido común de las respuestas a las preguntas: ¿Quién Soy Yo, de Dónde Vengo y a Dónde Voy?

Y surge precisamente así para que cualquier persona con un poquito de sencillez de corazón y con un poco de capacidad de reflexión, profundice en esos mismos puntos y trate de darse cuenta hacia a dónde va, hacia a dónde debería de ir y hacia a dónde verdaderamente quiere ir.

Pero con el fin de mejorar esa Conciencia y agrandar y despertar ese Sentido Común, para el Misionerismo es fundamental impulsar LA REVOLUCIÓN DEL CONOCIMIENTO, para que de esta forma el hombre se conozca más profundamente y a través de conocerse busque profundizar en el conocimiento, para que de esta forma, algún día, el Sentido Común sea el más Común de los Sentidos.

Bajado por: J. RUIZ

UN TIEMPITO PARA DIOS Y SU PALABRA


La verdad os hará libres
La verdad os hará libres
   "...En aquel tiempo dijo Jesús a los judíos que habían creído en él: Si os mantenéis en mi Palabra, seréis verdaderamente mis discípulos, y conoceréis la verdad y la verdad os hará libres. Ellos le respondieron: Nosotros somos descendencia de Abraham y nunca hemos sido esclavos de nadie. ¿Cómo dices tú: Os haréis libres? Jesús les respondió: En verdad, en verdad os digo: todo el que comete pecado es un esclavo. Y el esclavo no se queda en casa para siempre; mientras el hijo se queda para siempre. Si, pues, el Hijo os da la libertad, seréis realmente libres. Ya sé que sois descendencia de Abraham; pero tratáis de matarme, porque mi Palabra no prende en vosotros. Yo hablo lo que he visto donde mi Padre; y vosotros hacéis lo que habéis oído donde vuestro padre. Ellos le respondieron: Nuestro padre es Abraham. Jesús les dice: Si sois hijos de Abraham, haced las obras de Abraham. Pero tratáis de matarme, a mí que os he dicho la verdad que oí de Dios. Eso no lo hizo Abraham. Vosotros hacéis las obras de vuestro padre. Ellos le dijeron: Nosotros no hemos nacido de la prostitución; no tenemos más padre que a Dios. Jesús les respondió: Si Dios fuera vuestro Padre, me amaríais a mí, porque yo he salido y vengo de Dios; no he venido por mi cuenta, sino que Él me ha enviado".
            Juan 8, 31-42
       "Si os mantenéis en mi Palabra, seréis verdaderamente mis discípulos, y conoceréis la verdad y la verdad os hará libres". Porque somos pecadores y el pecado esclaviza. Nos mantiene atados con sus lazos atractivos y agradables a los sentidos, y, por nuestros propios medios, no somos capaces de soltarnos. Necesitamos mantenernos en la Palabra de Jesús, esto es, conociéndola, acogiéndola y viviéndola. En la Cuaresma la Iglesia nos ofrece, de manera especial, muchos medios para facilitarnos el poder llegar a ello: lecturas Bíblicas, oraciones especiales como el Via Crucis, talleres de oración, retiros espirituales. Lo que tenemos que hacer es estar dispuestos a ser libres, el mayor don que Dios nos ha podido dar después de la vida; y dispuestos a dejar que el Señor realice en nosotros la obra de la salvación, imitando a María, dejando que "se haga en mí según tu Palabra".
Propósito: Hoy quiero que me ayudes a permanecer en tu Palabra, Señor, para ser libre.
                  ¡ FELIZ DÍA, JESÚS VIVE Y YO LO CREO Y LO PROCLAMO !
                                                                   Miércoles. Marzo 20 de 2013 
J.RUIZ

martes, 19 de marzo de 2013

UN TIEMPITO PARA DIOS Y SU PALABRA

El misterio de la concepción, revelado a José 
El misterio de la concepción, revelado a José
    "...Jacob engendró a José, el esposo de María, de la cual nació Jesús, llamado Cristo. Cristo vino al mundo de la siguiente manera: Su madre, María, estaba desposada con José y, antes de que vivieran juntos, sucedió que ella, por obra del Espíritu Santo, estaba esperando un hijo. José, su esposo, como era justo, no queriendo ponerla en evidencia, resolvió repudiarla en secreto. Mientras pensaba en estas cosas, un ángel del Señor se le apareció en sueños y le dijo: «José, hijo de David, no dudes en recibir en tu casa a María, tu esposa, porque ella ha concebido del Espíritu Santo. Dará a luz un hijo, y tú le pondrás por nombre Jesús, porque él salvará a su pueblo de sus pecados». Despertado José del sueño, hizo como el ángel del Señor le había mandado". 
                                                  Mateo 1, 16. 18-21. 24

  Celebra hoy la Iglesia Católica la fiesta de San José, el padre de Jesús en su vida terrenal. Era un hombre justo, nos dice San Mateo, o sea que vivía la Ley, no como una obligación sino con alegría, como una buena noticia. Y con una fe hasta tal punto incondicional, que fue capaz de superar la terrible prueba de encontrarse a su esposa encinta sin haber estado con él, creyendo en la palabra del ángel que le decía que no dudara, y le explicaba los designios inescrutables de Dios. ¡Y su humildad! Toda su vida fue un canto perenne al abandono a la voluntad divina y providente del Señor, sin ningún cuestionamiento y sin ninguna duda. Por eso pudo disfrutar, en silencio y seguramente agradecido, de la presencia liberadora y arrebatadora de Jesús Niño en compañía de María, la llena de gracia. Fe, humildad, justicia, silencio y discreción: virtudes para meditar en esta Cuaresma y ejemplos a seguir en estos días de paternidad en crisis.
Propósito: Hoy revisaré la manera de imitar alguna de las virtudes del gran José de Nazareth.
                          ¡ FELIZ DÍA, JESÚS VIVE Y YO LO CREO Y LO PROCLAMO !
                                                                           Martes. Marzo 19 de 2013
J. RUIZ

lunes, 18 de marzo de 2013

UN TIEMPITO PARA DIOS Y SU PALABRA


Jesús, luz del mundo   "...En aquel tiempo dijo Jesús a los judíos: Yo soy la luz del mundo; el que me siga no caminará en la oscuridad, sino que tendrá la luz de la vida. Los fariseos le dijeron: Tú das testimonio de ti mismo: tu testimonio no vale. Jesús les respondió: Aunque yo dé testimonio de mí mismo, mi testimonio vale, porque sé de dónde he venido y a dónde voy; pero vosotros no sabéis de dónde vengo ni a dónde voy. Vosotros juzgáis según la carne; yo no juzgo a nadie; y si juzgo, mi juicio es verdadero, porque no estoy yo solo, sino yo y el que me ha enviado. Y en vuestra Ley está escrito que el testimonio de dos personas es válido. Yo soy el que doy testimonio de mí mismo y también el que me ha enviado, el Padre, da testimonio de mí. Entonces le decían: ¿Dónde está tu Padre? Respondió Jesús: No me conocéis ni a mí ni a mi Padre; si me conocierais a mí, conoceríais también a mi Padre. Estas palabras las pronunció junto al arca de las ofrendas, mientras enseñaba en el Templo. Y nadie le prendió, porque aún no había llegado su hora". 
                                                                                                Juan 8, 12-20
       Lo mismo que los fariseos de los tiempos de Jesús, aun hoy muchos siguen negando su testimonio porque "el testimonio de sí mismo no vale". Pero Él dijo: "Yo soy la luz del mundo", y la luz, no sólo alumbra el camino, los lugares y las cosas por donde va, sino que a sí misma se hace visible, se muestra a sí misma. ¿Qué otra clase de testimonio hace falta? Y sin embargo Jesús dá otro testimonio: "También el que me ha enviado, el Padre, dá testimonio de mí". Y en otra parte dice que también sus obras dan testimonio de Él. Y es evidente que es la verdad: la luz de su Palabra ilumina toda nuestra existencia. Tanto las horas buenas como las de angustia y desolación, a la luz de su presencia liberadora, se aclaran  y se hacen comprensibles a nuestra mente limitada. Y a la vez, si somos verdaderos seguidores suyos, esa luz se reflejará en nosotros  y se hará visible para otras personas que también puedan estar extraviadas en la oscuridad de sus caminos.
Propósito: Hoy pediré al Padre su ayuda para poder reflejar siquiera un poco de su luz con mi testimonio de vida.
                        ¡ FELIZ DÍA, JESÚS VIVE Y YO LO CREO Y LO PROCLAMO !
                                                                         Lunes. Marzo 18 de 2013
 J. RUIZ