martes, 31 de marzo de 2015

UN TIEMPITO PARA DIOS Y SU PALABRA

Traición y oscuridad   "...Cuando dijo estas palabras, Jesús se turbó en su interior y declaró: En verdad, en verdad os digo que uno de vosotros me entregará. Los discípulos se miraban unos a otros, sin saber de quién hablaba. Uno de sus discípulos, el que Jesús amaba, estaba a la mesa al lado de Jesús. Simón Pedro le hace una seña y le dice: Pregúntale de quién está hablando. El, recostándose sobre el pecho de Jesús, le dice: Señor, ¿quién es? Le responde Jesús: Es aquel a quien dé el bocado que voy a mojar. Y, mojando el bocado, le toma y se lo da a Judas, hijo de Simón Iscariote. Y entonces, tras el bocado, entró en él Satanás. Jesús le dice: Lo que vas a hacer, hazlo pronto. Pero ninguno de los comensales entendió por qué se lo decía. Como Judas tenía la bolsa, algunos pensaban que Jesús quería decirle: Compra lo que nos hace falta para la fiesta, o que diera algo a los pobres. En cuanto tomó Judas el bocado, salió. Era de noche. Cuando salió, dice Jesús: ahora ha sido glorificado el Hijo del hombre y Dios ha sido glorificado en él. Si Dios ha sido glorificado en él, Dios también le glorificará en sí mismo y le glorificará pronto. Hijos míos, ya poco tiempo voy a estar con vosotros. Vosotros me buscaréis, y, lo mismo que les dije a los judíos, que adonde yo voy, vosotros no podéis venir, os digo también ahora a vosotros. Simón Pedro le dice: Señor, ¿a dónde vas? Jesús le respondió: Adonde yo voy no puedes seguirme ahora; me seguirás más tarde. Pedro le dice: ¿Por qué no puedo seguirte ahora? Yo daré mi vida por ti. Le responde Jesús: ¿Que darás tu vida por mí? En verdad, en verdad te digo: no cantará el gallo antes que tú me hayas negado tres veces".
                                                                                                 Juan 13, 21-33.36-38
       La liturgia de hoy trae un Evangelio que habla de noche, tinieblas y traiciones. Cuando Judas, después de recibir de manos de Jesús el bocado con el que lo señalaba como el que lo había de entregar, salió de donde celebraban la cena, era de noche. Y cuando Pedro niega a Jesús ante los sirvientes del sumo sacerdote, también era de noche. Cuando, por cualquier circunstancia nos alejamos del Maestro, siempre habrá oscuridad y tinieblas, siempre será noche. Judas comete su falta por avaricia que le ciega y le lleva a ser hipócrita y a dejarse poseer por la soberbia que no le permite volver atrás. Pedro hace lo que hace por cobardía y físico miedo. Pero su buena voluntad, nobleza, amor y generosidad, le permiten arrepentirse, llorar amarga y humildemente y volver para convertirse en la roca inexpugnable en que Jesús edificará su Iglesia. Escojamos nosotros la actitud que queramos llevar en adelante: la una nos llevará a las tinieblas de la noche eterna y la otra, a la luz resplandeciente de la gloria sin término del Reino de los cielos.
Propósito: Hoy pediré al Señor me permita vivir siempre a la luz de sus palabras para poder derrotar la oscuridad.
                   ¡ FELIZ DÍA, JESÚS VIVE Y YO LO CREO Y LO PROCLAMO !
                                                                          Martes. Marzo 31 de 2015
J. RUIZ

lunes, 30 de marzo de 2015

UN TIEMPITO PARA DIOS Y SU PALABRA

"Pobres siempre tendréis con vosotros..."   "...Seis días antes de la Pascua, Jesús se fue a Betania, donde estaba Lázaro, a quien Jesús había resucitado de entre los muertos. Le dieron allí una cena. Marta servía y Lázaro era uno de los que estaban con él a la mesa. Entonces María, tomando una libra de perfume de nardo puro, muy caro, ungió los pies de Jesús y los secó con sus cabellos. Y la casa se llenó del olor del perfume. Dice Judas Iscariote, uno de los discípulos, el que lo había de entregar: ¿Por qué no se ha vendido este perfume por trescientos denarios y se ha dado a los pobres? Pero no decía esto porque le preocuparan los pobres, sino porque era ladrón, y como tenía la bolsa, se llevaba lo que echaban en ella. Jesús dijo: Déjala, que lo guarde para el día de mi sepultura. Porque pobres siempre tendréis con vosotros; pero a mí no siempre tendréis. Gran número de judíos supieron que Jesús estaba allí y fueron, no sólo por Jesús, sino también por ver a Lázaro, a quien había resucitado de entre los muertos. Los sumos sacerdotes decidieron dar muerte también a Lázaro, porque a causa de él muchos judíos se les iban y creían en Jesús".
                                                                                                        Juan 12, 1-11
       Jesús va visitar a sus amigos: Él siempre lo hace. Esta es una manifestación de amor. Y ¿quién nos ama más que Él? Seguramente también a nosotros ha venido muchas veces a visitarnos. Pero ¿habremos tenido nosotros, como sus amigos de Betania, siempre nuestra puerta del corazón abierta para Él? Recordemos que ésta es una puerta que se abre desde adentro solamente. ¿Seremos nosotros capaces de tratar a Jesús, o a aquellos en quienes, según él mismo, lo podemos encontrar: los pobres, como María, con ese desprendimiento y y esa generosidad que no tienen que ver con nada más?. Aprovechemos que, como nos dice Jesús, "a los pobres siempre los tendremos con nosotros".
Propósito: Hoy mi oración será: Maestro, enséñame a reconocerte en los pobres del camino y a acercarme a ellos.
                   ¡ FELIZ DÍA, JESÚS VIVE Y YO LO CREO Y LO PROCLAMO !
                                                                          Lunes. Marzo 30 de 2015
J. RUIZ

sábado, 28 de marzo de 2015

UN TIEMPITO PARA DIOS Y SU PALABRA

"¿Qué os parece? ¿Que no vendrá a la fiesta?"   "... Muchos de los judíos que habían venido a casa de María, viendo lo que había hecho, creyeron en él. Pero algunos de ellos fueron donde los fariseos y les contaron lo que había hecho Jesús. Entonces los sumos sacerdotes y los fariseos convocaron consejo y decían: ¿Qué hacemos? Porque este hombre realiza muchas señales. Si le dejamos que siga así, todos creerán en él y vendrán los romanos y destruirán nuestro Lugar Santo y nuestra nación. Pero uno de ellos, Caifás, que era el Sumo Sacerdote de aquel año, les dijo: Vosotros no sabéis nada, ni caéis en la cuenta que os conviene que muera uno solo por el pueblo y no perezca toda la nación. Esto no lo dijo por su propia cuenta, sino que, como era Sumo Sacerdote aquel año, profetizó que Jesús iba a morir por la nación - y no sólo por la nación, sino también para reunir en uno a los hijos de Dios que estaban dispersos. Desde este día, decidieron darle muerte. Por eso Jesús no andaba a en público entre los judíos, sino que se retiró de allí a la región cercana al desierto, a una ciudad llamada Efraím, y allí residía con sus discípulos. Estaba cerca la Pascua de los judíos, y muchos del país habían subido a Jerusalén, antes de la Pascua para purificarse. Buscaban a Jesús y se decían unos a otros estando en el Templo: ¿Qué os parece? ¿Que no vendrá a la fiesta?"                                                                                                                                 Juan 11, 45-56                                                                                      ¿Cómo no va a venir a la fiesta? Si es allí donde va a llevarse a cabo el gran final, con la refrendación en el árbol de la cruz, del cumplimiento de la promesa del Padre con su pueblo. Es allí donde va a tener lugar el gran misterio de la salvación a través de la Muerte y Resurrección de Jesús. Por eso Él no puede faltar a la cita en la que firmará con su sangre divina el pacto que inaugura el comienzo del Proyecto del Reino de Dios en la tierra y que Él vino a anunciar. Dejemos que Jesús obre "muchas señales" en nosotros para que así, nosotros y muchos otros, creamos en Él. El amor inmenso del Hijo de Dios hasta la muerte por nosotros, es lo que conmemoramos en estos días de cuaresma, para finalizar la próxima semana con la tristeza de su Muerte y con la alegría de su Resurrección. Si tenemos la fuerza de pasar por su muerte, llegaremos también a la gloria de la Resurrección. Pensemos en ello y obremos en consecuencia.                                                     Propósito: Hoy procuraré pensar en la muerte y en la Resurrección de Jesús y en sus consecuencias para la humanidad.                                                                                                      ¡ FELIZ DÍA, JESÚS VIVE Y YO LO CREO Y LO PROCLAMO !                                                                                             Sábado. Marzo 28 de 2015                 J. RUIZ

UN TIEMPITO PARA DIOS Y SU PALABRA


"Por sus frutos (sus obras) les conoceréis"   "...Los judíos tomaron piedras para apedrearlo. Entonces Jesús dijo: Les hice ver muchas obras buenas que vienen del Padre; ¿Por cuál de ellas me quieren apedrear?. Los judíos le respondieron: No queremos apedrearte por ninguna obra buena, sino porque blasfemas, ya que, siendo hombre, te haces Dios. Jesús les respondió: ¿No está escrito en la Ley: Yo dije: Ustedes son dioses? Si la Ley llama dioses a los que Dios dirigió su Palabra -y la Escritura no puede ser anulada- ¿Cómo dicen: Tú blasfemas, a quien el Padre santificó y envió al mundo, porque dijo: Yo soy Hijo de Dios? Si no hago las obras de mi Padre, no me crean; pero si las hago, crean en las obras, aunque no me crean a mí. Así reconocerán y sabrán que el Padre está en mí y yo en el Padre. Ellos intentaron nuevamente detenerlo, pero el se les escapó de las manos. Jesús volvió a ir al otro lado del Jordán, al lugar donde Juan había bautizado, y se quedó allí. Muchos fueron a verlo, y la gente decía: Juan no ha hecho ningún signo, pero todo lo que dijo de este hombre era verdad. Y en ese lugar muchos creyeron en él".
                                                         Juan 10, 31-42
          Las actuaciones todas del cristiano deben ser manifestaciones del Proyecto de Dios, como lo eran  las de Jesús, aunque se corra el riesgo, como en sus tiempos, de que no lo comprendan así. Debemos mostrar nuestra condición de testigos suyos tratando de actuar como Él, siguiendo su camino que es la vía del Amor a Dios y a los hombres, y con nuestra disposición sin condiciones para el servicio a los demás. Que sean siempre nuestras obras las que hablen por nosotros, antes que las palabras. "Por sus frutos (sus obras) los conoceréis".
Propósito: Hoy trataré de que mis palabras y mis acciones sean coherentes.
                 ¡ FELIZ DÍA, JESÚS VIVE Y YO LO CREO Y LO PROCLAMO !
                                                                             Viernes. Marzo 27 de 2015  
J. RUIZ

jueves, 26 de marzo de 2015

UN TIEMPITO PARA DIOS Y SU PALABRA

"El que es fiel a mi palabra, no morirá jamás"   "...En aquel tiempo decía Jesús: les aseguro que el que es fiel a mi palabra, no morirá jamás. Los judíos le dijeron: Ahora sí estamos seguros de que estás endemoniado. Abraham murió, los profetas también, y tú dices: El que es fiel a mi palabra, no morirá jamás. ¿Acaso eres más grande que nuestro padre Abraham, el cual murió? Los profetas también murieron. ¿Quién pretendes ser tú? Jesús respondió: Si yo me glorificara a mí mismo, mi gloria no valdría nada. Es mi Padre el que me glorifica, el mismo al que ustedes llaman nuestro Dios, y al que, sin embargo, no conocen. Yo lo conozco y si dijera: No lo conozco, sería, como ustedes, un mentiroso. Pero yo lo conozco y soy fiel a su palabra. Abraham, el padre de ustedes, se estremeció de gozo, esperando ver mi Día: lo vio y se llenó de alegría. Los judíos le dijeron: Todavía no tienes cincuenta años ¿y has visto a Abraham. Jesús respondió: Les aseguro que desde antes que naciera Abraham, Yo Soy. Entonces tomaron piedras para apedrearlo, pero Jesús se escondió y salió del Templo".
                         San Juan 8, 51-59
       Abiertamente en este Evangelio Jesús revela su identidad divina: "Antes de que Abraham existiera, Yo Soy". Pero muchos no le creyeron. Como tampoco hoy día muchos no lo creen, o lo hacen con  reservas. Creer en Dios es creer en su Palabra, vivir conforme a ella, guardar fidelidad a ella y no andar buscando en otras religiones o sectas lo que aquí se nos ha ofrecido, talvez desde pequeños, en el bautismo, pero que, por uno u otro motivo, no hemos podido comprender, como los judíos del tiempo de Jesús. Pero, como muchos de ellos, debemos tener nuestro corazón dispuesto a recibir, acoger y a vivir esa Palabra, porque "El que es fiel a mi palabra, no morirá jamás". Creer y amar aquello en lo que se cree.
Propósito: Hoy, y en adelante, no dejaré de leer el Santo Evangelio, Palabra de Dios, para conocerlo y así amarlo cada día más.
                 ¡ FELIZ DÍA, JESÚS VIVE Y YO LO CREO Y LO PROCLAMO !
                                                                        Jueves. Marzo 26 de 2015
J. RUIZ

miércoles, 25 de marzo de 2015

UN TIEMPITO PARA DIOS Y SU PALABRA

Disponibilidad incondicional   "...Al sexto mes fue enviado por Dios el ángel Gabriel a una ciudad de Galilea, llamada Nazaret, a una virgen desposada con un hombre llamado José, de la casa de David; el nombre de la virgen era María. Y entrando, le dijo: Alégrate, llena de gracia, el Señor está contigo. Ella se conturbó por estas palabras, y discurría qué significaría aquel saludo. El ángel le dijo: No temas, María, porque has hallado gracia delante de Dios; vas a concebir en el seno y vas a dar a luz un hijo, a quien pondrás por nombre Jesús. El será grande y será llamado Hijo del Altísimo, y el Señor Dios le dará el trono de David, su padre; reinará sobre la casa de Jacob por los siglos y su reino no tendrá fin. María respondió al ángel: ¿Cómo será esto, puesto que no conozco varón? El ángel le respondió: El Espíritu Santo vendrá sobre ti y el poder del Altísimo te cubrirá con su sombra; por eso el que ha de nacer será santo y será llamado Hijo de Dios. Mira, también Isabel, tu pariente, ha concebido un hijo en su vejez, y este es ya el sexto mes de aquella que llamaban estéril, porque ninguna cosa es imposible para Dios. Dijo María: He aquí la esclava del Señor; hágase en mí según tu palabra. Y el ángel dejándola se fue".
                                                                                                            Lucas 1, 26-38
         Disponibilidad total a la voluntad de Dios aunque sus planes no estén de acuerdo con los nuestros y a veces puedan ser o parecer hasta contrarios, es lo que la actitud de María nos enseña, según el relato que Lucas nos hace de aquel momento maravilloso, en que el "SÍ" de una niña definía el futuro del mundo. Abandono total y sin condiciones: "He aquí la esclava del Señor, hágase en mí según tu palabra". El "sí" de María al aceptar su misión; el "sí" de Jesús al aceptar su misión redentora, y la Resurrección a la gloria eterna, que en la Semana Santa hemos de conmemorar, resumen toda la historia de la salvación del género humano, por la bondad amorosa, compasiva y misericordiosa de Dios. Temas para reflexionar en estos días cuaresmales y para sacar conclusiones que nos lleven a tomar decisiones, como la de hacernos disponibles siempre a lo que la voluntad, siempre generosa para con nosotros, disponga.
Propósito: Hoy veré cómo hacer para estar siempre listo a recibir la voluntad de mi Padre con alegría y agradecimiento.
                  ¡ FELIZ DÍA, JESÚS VIVE Y YO LO CREO Y LO PROCLAMO !
                                                                         Miércoles. Marzo 25 de 2015
J. RUIZ

martes, 24 de marzo de 2015

UN TIEMPITO PARA DIOS Y SU PALABRA

"El que me ha enviado está conmigo"   "...Jesús les dijo otra vez: Yo me voy y vosotros me buscaréis, y moriréis en vuestro pecado. Adonde yo voy, vosotros no podéis ir. Los judíos se decían: ¿Es que se va a suicidar, pues dice: Adonde yo voy, vosotros no podéis ir? El les decía: Vosotros sois de abajo, yo soy de arriba. Vosotros sois de este mundo, yo no soy de este mundo. Ya os he dicho que moriréis en vuestros pecados, porque si no creéis que Yo Soy, moriréis en vuestros pecados. Entonces le decían: ¿Quién eres tú? Jesús les respondió:Desde el principio, lo que os estoy diciendo. Mucho podría hablar de vosotros y juzgar pero el que me ha enviado es veraz, y lo que le he oído a él es lo que hablo al mundo. No comprendieron que les hablaba del Padre. Les dijo, pues, Jesús: Cuando hayáis levantado al Hijo del hombre, entonces sabréis que Yo Soy, y que no hago nada por mi propia cuenta; sino que, lo que el Padre me ha enseñado, eso es lo que hablo. Y el que me ha enviado está conmigo: no me ha dejado solo, porque yo hago siempre lo que le agrada a él. Al hablar así, muchos creyeron en él".
                                                 Juan 8, 21-30
       El hombre sólo le dá sentido a su vida cuando ésta está orientada a cumplir la voluntad de Dios, así como la de Jesús estuvo dedicada únicamente a cumplir la voluntad de su Padre. Y debemos hacerlo con la misma actitud con que Él lo hizo: "Yo hago siempre lo que le agrada a Él".Y, además, sé que, como a Jesús, tampoco a nosotros nos dejará solos, siempre estará con nosotros "hasta la consumación de los siglos", alentándonos y ayudándonos en los momentos difíciles de nuestro caminar por el camino de la Cruz, camino que no da vueltas, que es directo, y que es el que lleva, de manera segura, a la gloria de la Resurrección, después de pasar por la cima del Calvario. Hagamos siempre lo que le agrada a Él, comuniquémonos con Él en la oración frecuente y nuestra vida, y nuestra cruz, y nuestros sufrimientos, tendrán sentido: Amor y servicio incondicional a los demás, especialmente a los excluídos de la sociedad, a los enfermos, a los desprotegidos y a los que, de alguna manera, son tenidos por menos, pues ellos serán "Bienaventurados" y "de ellos es el Reino de los cielos".
Propósito: Hoy procuraré entender la respuesta de Jesús: "Desde el principio os estoy diciendo quién soy yo".
                    ¡ FELIZ DÍA, JESÚS VIVE Y YO LO CREO Y LO PROCLAMO !
                                                                           Martes. Marzo 24 de 2015
J. RUIZ

lunes, 23 de marzo de 2015

UN TIEMPITO PARA DIOS Y SU PALABRA


"Que arroje la primera piedra"   "...Mas Jesús se fue al monte de los Olivos. Pero de madrugada se presentó otra vez en el Templo, y todo el pueblo acudía a él. Entonces se sentó y se puso a enseñarles. Los escribas y fariseos le llevan una mujer sorprendida en adulterio, la ponen en medio y le dicen: Maestro, esta mujer ha sido sorprendida en flagrante adulterio. Moisés nos mandó en la Ley apedrear a estas mujeres. ¿Tú qué dices? Esto lo decían para tentarle, para tener de qué acusarle. Pero Jesús, inclinándose, se puso a escribir con el dedo en la tierra. Pero, como ellos insistían en preguntarle, se incorporó y les dijo: Aquel de vosotros que esté sin pecado, que le arroje la primera piedra. E inclinándose de nuevo, escribía en la tierra. Ellos, al oír estas palabras, se iban retirando uno tras otro, comenzando por los más viejos; y se quedó solo Jesús con la mujer, que seguía en medio. Incorporándose Jesús le dijo: Mujer, ¿dónde están? ¿Nadie te ha condenado? Ella respondió: Nadie, Señor. Jesús le dijo: Tampoco yo te condeno. Vete, y en adelante no peques más".
                                                                                              Juan 8, 1-11
       Jesús no vino a condenar al mundo, sino a salvarlo. Como en este caso a la mujer adúltera. Ni siquiera pregunta, a ella o a sus acusadores, si es verdad la acusación. Sólo le interesa salvarla de la turba de hombres que quieren hacer justicia. Perdón y misericordia, es el lema de la Nueva Ley, la ley del Amor, que ahora ha sido instaurada y es la que rige en el Reino de Dios. Es la enseñanza contundente del Maestro en este día: no juzguemos ni condenemos a los demás sin revisar antes nuestras propias actuaciones, pues talvez no resistamos la revisión. Él aborrece el pecado, pero ama al pecador. Por eso, después de perdonar a la mujer, le pide que no peque más. Amemos, pues, a los que nos rodean sin importar que sean o no pecadores. Ese es nuestro mandato, no el de juzgar ni condenar.
Propósito: Hoy, y en adelante, evitaré emitir juicios sobre los demás. 
                   ¡ FELIZ DÍA, JESÚS VIVE Y YO LO CREO Y LO PROCLAMO !
                                                                          Lunes. Marzo 23 de 2015
J. RUIZ

domingo, 22 de marzo de 2015

UN TIEMPITO PARA DIOS Y SU PALABRA

"Si el grano de trigo no muere, no dá fruto"   "...En aquel tiempo, entre los que habían llegado a Jerusalén para dar culto a Dios con ocasión de la fiesta, había algunos griegos. Estos se acercaron a Felipe, que era natural de Betsaida de Galilea, y le dijeron. Señor, queremos ver a Jesús. Felipe se lo dijo a Andrés, y los dos juntos se lo hicieron saber a Jesús. Jesús contestó: Ha llegado la hora en que Dios va a glorificar al Hijo del hombre. Yo les aseguro que si el grano de trigo que cae en la tierra no muere, queda infecundo; pero si muere dará fruto abundante. Quien aprecia su vida terrena, la perderá; en cambio, quien sepa desprenderse de ella, la conservará para la vida eterna. Si alguien quiere servirme, que me siga; correrá la misma suerte que yo. Todo aquél que me sirva será honrado por mi Padre. Me encuentro profundamente angustiado; pero, ¿qué es lo que puedo decir? ¿Padre, líbrame de esta hora? De ningún modo; porque he venido precisamente para aceptar esta hora. Padre, glorifica tu nombre. Entonces se oyó esta voz venida del cielo: Yo lo he glorificado y volveré a glorificarlo. De los que estaban presentes, unos creyeron que había sido un trueno; otros decían: Le ha hablado un ángel. Jesús explicó: Esta voz se ha dejado oír no por mí, sino por ustedes. Es ahora cuando el mundo va a ser juzgado; es ahora cuando el que tiraniza a este mundo va a ser arrojado fuera. Y yo en vez que haya sido elevado sobre la tierra, atraeré a todos hacía mí. Con esta afirmación, Jesús quiso dar a entender la forma en que iba a morir".
                                                     Juan 12, 20-33
       Estamos ya a una semana de la Semana Mayor. De la Semana que conmemora los misterios más grandes de la fe cristiana: Pasión y muerte afrentosa de Jesús y su Resurrección gloriosa. Y nosotros, como los griegos del relato, vamos itinerantes, peregrinos, buscando aquello que anhela el corazón y que no encontramos entre las innumerables y tentadoras ofertas que el mundo actual, facilista y consumista, nos ofrece. Y aunque la naturaleza humana de Jesús se resiente y se siente angustiada previendo lo que viene, no renuncia a su misión salvadora, y afronta los riesgos con la valentía que da el amor inconmensurable que nos tiene. Él sabe que "si el grano que cae a la tierra no muere, queda infecundo", y la voluntad de su Padre es que dé mucho fruto. Amor y servicio, es el ejemplo con el que predica. O, como diría Msr. Romero, cuya conmemoración del 35° aniversario de su sacrificio, que continúa dando frutos, y la proclamación de su beatificación, se acercan, "la gloria de Dios es que el pobre viva".
Propósito: Hoy meditaré sobre mi condición de peregrino y la necesidad de morir - al egoísmo, al odio, a la injusticia - para dar fruto.
                     ¡ FELIZ DÍA, JESÚS VIVE Y YO LO CREO Y LO PROCLAMO !
                                                                            Domingo. Marzo 22 de 2015
J. RUIZ

sábado, 21 de marzo de 2015

UN TIEMPITO PARA DIOS Y SU PALABRA

¿Quién es Jesús?   "...En aquel tiempo la gente que oyó estos discursos de Jesús, unos decían: Este es verdaderamente el profeta. Otros decían: Este es el Cristo. Pero otros replicaban: ¿Acaso va a venir de Galilea el Cristo? ¿No dice la Escritura que el Cristo vendrá de la descendencia de David y de Belén, el pueblo de donde era David? Se originó, pues, una disensión entre la gente por causa de él. Algunos de ellos querían detenerle, pero nadie le echó mano. Los guardias volvieron donde los sumos sacerdotes y los fariseos. Estos les dijeron: ¿Por qué no le habéis traído? Respondieron los guardias: Jamás un hombre ha hablado como habla ese hombre. Los fariseos les respondieron: ¿Vosotros también os habéis dejado embaucar? ¿Acaso ha creído en él algún magistrado o algún fariseo? Pero esa gente que no conoce la Ley son unos malditos. Les dice Nicodemo, que era uno de ellos, el que había ido anteriormente donde Jesús: ¿Acaso nuestra Ley juzga a un hombre sin haberle antes oído y sin saber lo que hace? Aquellos le respondieron: ¿También tú eres de Galilea? Indaga y verás que de Galilea no sale ningún profeta. Y se volvieron cada uno a su casa".
                                                                                             Juan 7, 40-53
       No es buena cosa confiar en los pre-juicios, porque cuando pre-concebimos una idea lo hacemos teniendo presente sólo nuestros deseos y conveniencias. La idea que los judíos se habían formado, que habían pre-concebido, del Mesías, era la del líder poderoso y fuerte que habría de librarlos de la tiranía del pueblo romano que los tenía sojuzgados. Era lo que necesitaban, era lo que les convenía. Por eso cuando hay indicios de que Jesús podría ser ese Mesías esperado, se les forma semejante confusión: ni sus actuaciones ni sus palabras cuadran con lo que esperaban. Y talvez nosotros hoy en día también esperamos muchas veces que ese Dios hecho hombre, Jesús, se acomode a nuestras expectativas, que no siempre corresponden al proyecto de Dios. Entendamos que somos nosotros los que debemos acomodarnos a ese proyecto, no al revés, que Él, en su infinita sabiduría, nos irá descubriendo poco a poco. Dios es Amor y amor por nosotros, y en base a eso ha construido nuestro proyecto. Aceptémoslo así que esa es la verdadera realidad: Él es el Hijo de Dios.
Propósito: Procuraré entender y actuar según las contradicciones de que Jesús es signo permanente: el amor por encima de todo. 
                   ¡ FELIZ DÍA, JESÚS VIVE Y YO LO CREO Y LO PROCLAMO !
                                                                          Sábado. Marzo 21 de 2015
J. RUIZ

viernes, 20 de marzo de 2015

UN TIEMPITO PARA DIOS Y SU PALABRA

En las manos de Dios.   "...En aquel tiempo, recorría Jesús la Galilea, pues no podía andar por Judea, porque los judíos buscaban matarle. Se acercaba la fiesta judía de las Tiendas. Pero después que sus hermanos subieron a la fiesta, entonces Él también subió no manifiestamente, sino de incógnito. Decían algunos de los de Jerusalén: ¿No es a ése a quien quieren matar? Mirad cómo habla con toda libertad y no le dicen nada. ¿Habrán reconocido de veras las autoridades que este es el Cristo? Pero éste sabemos de dónde es, mientras que, cuando venga el Cristo, nadie sabrá de dónde es. Gritó, pues, Jesús, enseñando en el Templo y diciendo: Me conocéis a mí y sabéis de dónde soy. Pero yo no he venido por mi cuenta; sino que verdaderamente me envía el que me envía; pero vosotros no le conocéis. Yo le conozco, porque vengo de él y él es el que me ha enviado. Querían, pues, detenerle, pero nadie le echó mano, porque todavía no había llegado su hora".
                      Juan 7,1-2.10.25-30
       La presencia de Jesús aún hoy sigue despertando confusión y controversia entre las gentes, sobre todo entre aquellos que no le conocen, porque sus palabras y su actitud están en contravía de todas las normas establecidas. Resumir toda la Ley y los profetas en un sólo mandamiento, el del amor, y mostrar con su vida cómo se hace, es algo difícil de digerir. Por eso la confusión: hay muchas ovejas que no conocen a su Pastor o que no son de este aprisco. Necesitamos es fe para conocer de veras a Jesús y para que no haya más confusión y para que así reinen la alegría y el amor. Pongámonos en sus manos, en abandono total y la confianza absoluta de que no seremos defraudados.
Propósito: Hoy me pondré total y libremente en las manos de Dios: que sea lo que Él quiera.
                    ¡ FELIZ DÍA, JESÚS VIVE Y YO LO CREO Y LO PROCLAMO !
                                                                           Viernes. Marzo 20 de 2015
J. RUIZ

jueves, 19 de marzo de 2015

UN TIEMPITO PARA DIOS Y SU PALABRA

Un hombre justo: modelo de fe y humildad.   "...Jacob engendró a José, el esposo de María, de la cual nació Jesús, llamado Cristo. Cristo vino al mundo de la siguiente manera: Su madre, María, estaba desposada con José y, antes de que vivieran juntos, sucedió que ella, por obra del Espíritu Santo, estaba esperando un hijo. José, su esposo, como era justo, no queriendo ponerla en evidencia, resolvió repudiarla en secreto. Mientras pensaba en estas cosas, un ángel del Señor se le apareció en sueños y le dijo: José, hijo de David, no dudes en recibir en tu casa a María, tu esposa, porque ella ha concebido del Espíritu Santo. Dará a luz un hijo, y tú le pondrás por nombre Jesús, porque él salvará a su pueblo de sus pecados. Despertado José del sueño, hizo como el ángel del Señor le había mandado". 
                                                                                              Mateo 1, 16. 18-21. 24
       De José, el padre designado por Dios para cuidar a su propio Hijo, no nos ha llegado, ni en los Evangelios ni en la historia, ninguna palabra salida de su boca. El evangelista nos cuenta simplemente que "era un hombre justo". ¡Nada menos! Un hombre justo es el que vive la fe y la Palabra de Dios. Por eso José, que se encontraba "cabizmundo y meditabajo" porque quería mucho a su esposa María y no alcanzaba a comprender cómo estaba en embarazo, aunque, como la conocía, sabía que debía haber alguna explicación. Y Dios le envía su ángel a que le dé la explicación que busca. Y la fe y la humildad que lo guían por el camino que es, le devuelven la paz y la tranquilidad y la fuerza para abandonarse por completo a la voluntad del Padre. ¡Qué modelo de hombre grande! Imitémoslo.
Propósito: Hoy procuraré aceptar, sin complicaciones, lo que el Buen Dios quiera mandarme.
                  ¡ FELIZ DÍA, JESÚS VIVE Y YO LO CREO Y LO PROCLAMO !
                                                                         Jueves. Marzo 19 de 2015  
J. RUIZ

miércoles, 18 de marzo de 2015

UN TIEMPITO PARA DIOS Y SU PALABRA

"No busco mi voluntad, sino la voluntad del que me ha enviado"..."...En aquel tiempo, dijo Jesús a los judíos (que le interpelaban porque había curado en sábado): Mi Padre trabaja hasta ahora, y yo también trabajo. Por eso los judíos trataban con mayor empeño de matarle, porque no sólo quebrantaba el sábado, sino que llamaba a Dios su propio Padre, haciéndose a sí mismo igual a Dios. Jesús, pues, tomando la palabra, les decía: En verdad, en verdad os digo: el Hijo no puede hacer nada por su cuenta, sino lo que ve hacer al Padre: lo que hace él, eso también lo hace igualmente el Hijo. Porque el Padre quiere al Hijo y le muestra todo lo que él hace. Y le mostrará obras aún mayores que estas, para que os asombréis. Porque, como el Padre resucita a los muertos y les da la vida, así también el Hijo da la vida a los que quiere. Porque el Padre no juzga a nadie; sino que todo juicio lo ha entregado al Hijo, para que todos honren al Hijo como honran al Padre. El que no honra al Hijo no honra al Padre que lo ha enviado. En verdad, en verdad os digo: el que escucha mi Palabra y cree en el que me ha enviado, tiene vida eterna y no incurre en juicio, sino que ha pasado de la muerte a la vida. En verdad, en verdad os digo: llega la hora (ya estamos en ella), en que los muertos oirán la voz del Hijo de Dios, y los que la oigan vivirán. Porque, como el Padre tiene vida en sí mismo, así también le ha dado al Hijo tener vida en sí mismo, y le ha dado poder para juzgar, porque es Hijo del hombre. No os extrañéis de esto: llega la hora en que todos los que estén en los sepulcros oirán su voz y saldrán los que hayan hecho el bien para una resurrección de vida, y los que hayan hecho el mal, para una resurrección de juicio. Y no puedo hacer nada por mi cuenta: juzgo según lo que oigo; y mi juicio es justo, porque no busco mi voluntad, sino la voluntad del que me ha enviado".
                                                                                                             Juan 5, 17-30 
       Hacer la voluntad del Padre, como Jesús a quien ha enviado a traernos su Palabra, es nuestra misión. Aunque no la entendamos, o aunque nos parezca muy difícil su cumplimiento, es indispensable que lo hagamos, si queremos llegar a la vida eterna en la Casa del Padre. "El que escucha mi Palabra y cree en el que me ha enviado, tiene vida eterna". El que "escucha mi Palabra", esto es, acogerla, vivirla y propagarla, y creer en el Padre, que es quien le ha enviado, es quien cumplirá la voluntad de Dios, ya que su Palabra es fuente de vida eterna, vida llena de paz, alegría y gozo en el Espíritu Santo.
Propósito: Hoy procuraré, no sólo leer la Palabra de Dios, sino interiorizarla para ver la forma de vivirla.
                    ¡ FELIZ DÍA, JESÚS VIVE Y YO LO CREO Y LO PROCLAMO !
                                                                     Miércoles. Marzo 18 de 2015
J. RUIZ

martes, 17 de marzo de 2015

UN TIEMPITO PARA DIOS Y SU PALABRA

"Señor, no tengo a nadie que me meta en la piscina..."   "...Después de esto, hubo una fiesta de los judíos, y Jesús subió a Jerusalén. Hay en Jerusalén, junto a la Probática, una piscina que se llama en hebreo Betesda, que tiene cinco pórticos. En ellos yacía una multitud de enfermos, ciegos, cojos, paralíticos, esperando la agitación del agua. Había allí un hombre que llevaba treinta y ocho años enfermo. Jesús, viéndole tendido y sabiendo que llevaba ya mucho tiempo, le dice:¿Quieres curarte? Le respondió el enfermo: Señor, no tengo a nadie que me meta en la piscina cuando se agita el agua; y mientras yo voy, otro baja antes que yo. Jesús le dice: Levántate, toma tu camilla y anda. Y al instante el hombre quedó curado, tomó su camilla y se puso a andar. Pero era sábado aquel día. Por eso los judíos decían al que había sido curado: Es sábado y no te está permitido llevar la camilla. El le respondió: El que me ha curado me ha dicho: Toma tu camilla y anda. Ellos le preguntaron: ¿Quién es el hombre que te ha dicho: Tómala y anda? Pero el curado no sabía quién era, pues Jesús había desaparecido porque había mucha gente en aquel lugar. Más tarde Jesús le encuentra en el Templo y le dice: Mira, estás curado; no peques más, para que no te suceda algo peor. El hombre se fue a decir a los judíos que era Jesús el que lo había curado. Por eso los judíos perseguían a Jesús, porque hacía estas cosas en sábado".
           Juan 5, 1-3. 5-16
       Las faltas que a diario cometemos contra Jesús al fallarle, de alguna manera a los demás, con nuestras injusticias, con nuestros odios, con nuestro orgullo, con nuestras exclusiones, son las que nos mantienen, como al hombre del Evangelio, paralíticos, atados sin podernos mover, como quisiéramos, en nuestra vida espiritual. Y talvez no hemos tenido "a nadie que nos meta a la piscina". Pero, como él, no debemos desmayar, si de veras queremos lograr nuestra curación. Debemos perseverar, como él: ¡treinta y ocho años buscando su oportunidad! Pero "la perseverancia vence lo que la dicha no alcanza". Jesús, buscando como siempre hace, a sus ovejas perdidas y en problemas, lo encontró y lo sanó. Aprendamos de este enfermo a perseverar en nuestra esperanza y a estar siempre preparados para aprovechar la oportunidad, que talvez nos llegue en esta Cuaresma, con una homilía, con un encuentro con un amigo, o en cualquiera de las formas que el Maestro escoja para llegar hasta nosotros. Y seremos curados, no importa que sea sábado. Él sólo se fija en nuestras necesidades y si tenemos voluntad de ser librados de ellas.
Propósito: Hoy procuraré perseverar en buscar aquello que llevo tiempo necesitando y no consigo, si es voluntad de mi Padre.
                    ¡ FELIZ DÍA, JESÚS VIVE Y YO LO CREO Y LO PROCLAMO !
                                                                           Martes. Marzo 17 de 2015
J. RUIZ

lunes, 16 de marzo de 2015

UN TIEMPITO PARA DIOS Y SU PALABRA

La fe cura a distancia.   "...Pasados los dos días en Samaria, Jesús partió de allí para Galilea. Pues Jesús mismo había afirmado que un profeta no goza de estima en su patria. Cuando llegó, pues, a Galilea, los galileos le hicieron un buen recibimiento, porque habían visto todo lo que había hecho en Jerusalén durante la fiesta, pues también ellos habían ido a la fiesta. Volvió, pues, a Caná de Galilea, donde había convertido el agua en vino. Había un funcionario real, cuyo hijo estaba enfermo en Cafarnaúm. Cuando se enteró de que Jesús había venido de Judea a Galilea, fue donde él y le rogaba que bajase a curar a su hijo, porque se iba a morir. Entonces Jesús le dijo: Si no veis señales y prodigios, no creéis. Le dice el funcionario: Señor, baja antes que se muera mi hijo. Jesús le dice: Vete, que tu hijo vive. Creyó el hombre en la palabra que Jesús le había dicho y se puso en camino. Cuando bajaba, le salieron al encuentro sus siervos, y le dijeron que su hijo vivía. Él les preguntó entonces la hora en que se había sentido mejor. Ellos le dijeron: Ayer a la hora séptima le dejó la fiebre. El padre comprobó que era la misma hora en que le había dicho Jesús: Tu hijo vive, y creyó él y toda su familia. Esta nueva señal, la segunda, la realizó Jesús cuando volvió de Judea a Galilea".
                                     Juan 4, 43-54
       El poder de la fe en la Palabra de Jesús no tiene límite conocido alguno. Porque es creer en la Palabra de Dios y para Él todo es posible. Y si de veras tenemos esa fe tampoco para nosotros la distancia o la falta de medios sería excusa para no hacer las cosas: sólo pidamos en nombre del Señor que Él se encargará del resto. "Si tuviéramos fe como un granito de mostaza..."Y si queremos que Jesús nos cure, o a nuestros familiares y relacionados, o a todos, que todos estamos enfermos, sólo permitamos que su gracia infinita obre en nosotros, no porque lo merezcamos, sino porque Él es compasivo y misericordioso. Y lo es con todos porque "Él vino para que todos tengamos vida y la tengamos en abundancia".
Propósito: Hoy, en mi oración, renovaré con sinceridad, mis promesas bautismales en la oración del Credo.
                   ¡ FELIZ DÍA, JESÚS VIVE Y YO LO CREO Y LO PROCLAMO !
                                                                          Lunes. Marzo 16 de 2015
J. RUIZ

domingo, 15 de marzo de 2015

UN TIEMPITO PARA DIOS Y SU PALABRA

El que obra el mal aborrece la luz".   "...Continuó diciendo Jesús: Y como Moisés levantó la serpiente en el desierto, así tiene que ser levantado el Hijo del hombre, para que todo el que crea tenga por él vida eterna. Porque tanto amó Dios al mundo que dio a su Hijo único, para que todo el que crea en él no perezca, sino que tenga vida eterna. Porque Dios no ha enviado a su Hijo al mundo para juzgar al mundo, sino para que el mundo se salve por él. El que cree en él, no es juzgado; pero el que no cree, ya está juzgado, porque no ha creído en el Nombre del Hijo único de Dios. Y el juicio está en que vino la luz al mundo, y los hombres amaron más las tinieblas que la luz, porque sus obras eran malas. Pues todo el que obra el mal aborrece la luz y no va a la luz, para que no sean censuradas sus obras. Pero el que obra la verdad, va a la luz, para que quede de manifiesto que sus obras están hechas según Dios".                                                                                                                                     Juan 3, 14-21   
          La liturgia de este domingo nos invita a la alegría: "Festejad a Jerusalén, gozad con ella todos los que la amáis...", dice la antífona de entrada. No es para menos si pensamos en lo que el Evangelio nos recuerda: "Porque tanto amó Dios al mundo que dio a su Hijo único, para que todo el que crea en él no perezca, sino que tenga vida eterna". ¿Qué más necesitamos para estar alegres? Por amor nuestro Padre nos dará la vida eterna. No tenemos sino que recibirla. Aceptemos su Palabra, recibamos su luz para que mostremos que no amamos las tinieblas y que nuestras obras son buenas. La Iglesia en este tiempo de Cuaresma nos lo recuerda constantemente y esa es, precisamente, la justificación de su presencia en el mundo: recordarnos que el amor de Dios nos ha sido dado, no por nuestros méritos, sino únicamente por su bondad y misericordia.
Propósito: Hoy trataré de no olvidar en ningún momento que Dios me ama, no porque yo sea bueno, sino porque Él lo es.
                    ¡ FELIZ DÍA, JESÚS VIVE Y YO LO CREO Y LO PROCLAMO !
                                                                           Domingo. Marzo 15 de 2015
J. RUIZ

sábado, 14 de marzo de 2015

UN TIEMPITO PARA DIOS Y SU PALABRA

"Gracias, Señor, porque yo no soy como aquel".   "...En aquel tiempo, dijo Jesús esta parábola por algunos que se tenían por justos y despreciaban a los demás: Dos hombres subieron al templo a orar; uno fariseo, otro publicano. El fariseo, de pie, oraba en su interior de esta manera: ¡Oh Dios! Te doy gracias porque no soy como los demás hombres, rapaces, injustos, adúlteros, ni tampoco como este publicano. Ayuno dos veces por semana, doy el diezmo de todas mis ganancias. En cambio el publicano, manteniéndose a distancia, no se atrevía ni a alzar los ojos al cielo, sino que se golpeaba el pecho, diciendo: ¡Oh Dios! ¡Ten compasión de mí, que soy pecador! Os digo que éste bajó a su casa justificado y aquél no. Porque todo el que se ensalce, será humillado; y el que se humille, será ensalzado".
                     Lucas 18, 9-14
       No es que sea mentira lo que el fariseo está diciendo. Lo que pasa es que no tiene remordimiento, conciencia o sentimiento de culpa (que todo viene a ser lo mismo) que le haga caer en cuenta de que no es perfecto, de que es pecador, como lo somos todos. Y, cuando se está enfermo, lo primero para recobrar la salud, es reconocerlo. Por eso él no salió purificado de la presencia del "Médico", pero sí el pobre publicano, que, por el contrario, no se consideraba digno de nada y que no hacía más que pedir perdón por sus faltas. El sentimiento de culpa o remordimiento, que hoy consideramos prácticamente como un mal psicológico, una aberración, es necesario para nuestra vida espiritual, pues nos hace caer en cuenta de lo que, por alguna razón, está mal, y protesta contra nuestra existencia auto-satisfecha.
Propósito: Hoy procuraré darme cuenta de todo el camino que me falta.
                   ¡ FELIZ DÍA, JESÚS VIVE Y YO LO CREO Y LO PROCLAMO !
                                                                          Sábado. Marzo 14 de 2015
J. RUIZ

viernes, 13 de marzo de 2015

UN TIEMPITO PARA DIOS Y SU PALABRA

Amar, es el primero y el más grande de los mandamientos.   "...En aquel tiempo, uno de los letrados se acercó a Jesús y le preguntó: ¿Cuál es el primero de todos los mandamientos? Jesús le contestó: El primero es: Escucha, Israel: El Señor, nuestro Dios, es el único Señor, y amarás al Señor, tu Dios, con todo tu corazón, con toda tu alma, con toda tu mente y con todas tus fuerzas. El segundo es: Amarás a tu prójimo como a ti mismo. No existe otro mandamiento mayor que éstos. Le dijo el escriba: Muy bien, Maestro; tienes razón al decir que Él es único y que no hay otro fuera de Él, y amarle con todo el corazón, con toda la inteligencia y con todas las fuerzas, y amar al prójimo como a sí mismo vale más que todos los holocaustos y sacrificios. Y Jesús, viendo que le había contestado con sensatez, le dijo: No estás lejos del Reino de Dios. Y nadie más se atrevía ya a hacerle preguntas".
                                 Marcos 12, 28-34
       Más claro no es posible: amar a Dios y a los demás, es lo más grande y es lo primero que un cristiano debe hacer, y en función de lo cual debe vivir su vida toda, teniendo siempre, como referencia de ese amor, a Jesús, cuyo amor al Padre y a nosotros lo llevó a darse a sí  mismo como plenitud de amor. Amar a Dios y a los demás es quitarme yo para poner a Dios y a los otros en mi lugar. O, como diría Pablo, "Ya no soy yo quien vive, es Cristo quien vive en mí". ¿Sí somos capaces de dejar de hacer algo porque, de alguna manera, ofende a Dios o a alguno de nuestros hermanos? Es tiempo de recogimiento y conversión. Probémoslo.
Propósito: Hoy procuraré no hacer nada que pueda ofender a alguno de quienes están a mi alrededor.
                   ¡ FELIZ DÍA, JESÚS VIVE Y YO LO CREO Y LO PROCLAMO !
                                                                          Viernes. Marzo 13 de 2015
J. RUIZ

jueves, 12 de marzo de 2015

UN TIEMPITO PARA DIOS Y SU PALABRA

Un reino dividido se derrumba  "...En aquel tiempo, Jesús estaba expulsando un demonio que era mudo; sucedió que, cuando salió el demonio, rompió a hablar el mudo, y las gentes se admiraron. Pero algunos de ellos dijeron: Por Belcebú, Príncipe de los demonios, expulsa los demonios. Otros, para ponerle a prueba, le pedían una señal del cielo. Pero Él, conociendo sus pensamientos, les dijo: Todo reino dividido contra sí mismo queda asolado, y casa contra casa, cae. Si, pues, también Satanás está dividido contra sí mismo, ¿cómo va a subsistir su reino? Porque decís que yo expulso los demonios por Belcebú. Si yo expulso los demonios por Belcebú, ¿por quién los expulsan vuestros hijos? Por eso, ellos serán vuestros jueces. Pero si por el dedo de Dios expulso yo los demonios, es que ha llegado a vosotros el Reino de Dios. Cuando uno fuerte y bien armado custodia su palacio, sus bienes están en seguro; pero si llega uno más fuerte que él y le vence, le quita las armas en las que estaba confiado y reparte sus despojos. El que no está conmigo, está contra mí, y el que no recoge conmigo, desparrama".
                                                    Lucas 11, 14-23
       Siempre se ha dicho que "la unidad, hace la fuerza" y es lo que Jesús hoy en su Evangelio nos ratifica con la comparación del Reino dividido. Pero para poder estar unidos tenemos que tener unidad de pensamiento, de ideales y de metas a lograr. Y, si somos seguidores de Jesús, nuestra meta no puede ser otra que la expansión del Reino de Dios entre nosotros, como Él lo ha querido siempre. Y nuestra lucha debe ser siempre la de ver cómo conseguirlo y de ver cómo hacer para que ese Reino de amor, de perdón, de justicia y de paz, por medio de la disposición sin condiciones al servicio de los otros, se haga una hermosa realidad. Para ello: oración, acogida y servicio.
Propósito: Hoy evitaré las divisiones en mi entorno familiar.
                    ¡ FELIZ DÍA, JESÚS VIVE Y YO LO CREO Y LO PROCLAMO !
                                                                           Jueves. Marzo 12 de 2015
J. RUIZ

miércoles, 11 de marzo de 2015

UN TIEMPITO PARA DIOS Y SU PALABRA

Hasta la más pequeña letra de la Ley debe cumplirse.   "...En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: No crean que he venido a abolir la Ley y los Profetas. No he venido a abolir, sino a dar cumplimiento. Yo les aseguro que antes se acabarán el cielo y la tierra, que deje de cumplirse hasta la más pequeña letra o coma de la ley. Por tanto, el que quebrante uno de estos preceptos menores y así lo enseñe a los hombres, será el más pequeño en el Reino de los Cielos; en cambio, el que los cumpla y los enseñe, ése será grande en el Reino de los Cielos".
                                                        Mateo 5, 17-19
      Para ser grandes en el Reino de los cielos lo que hay que hacer es "cumplir los preceptos de la Ley y enseñarlos". Por eso Jesús no vino a abolirla sino a darle cumplimiento y a enseñarnos cómo hay que llevarla a su plenitud en el máximo mandamiento, que es el resumen de todos, en el mandamiento del Amor y del servicio a los demás. En el cristianismo no ocurre como en las otras religiones que buscan siempre la trascendencia, las realidades eternas, a Dios. En el cristianismo es Dios quien busca al hombre, y en Jesús se hace realidad esa búsqueda con su llegada hasta nosotros y, sobre todo, para morir por nosotros y rescatarnos para sí, pues estábamos como secuestrados por el pecado, y el precio de ese rescate era la sangre del Hijo de Dios. Conozcamos, pues, la Ley; cumplámosla y enseñémosla.
Propósito: Hoy procuraré dejar que Jesús me encuentre.
                  ¡ FELIZ DÍA, JESÚS VIVE Y YO LO CREO Y LO PROCLAMO !
                                                                         Miércoles. Marzo 11 de 2015
J. RUIZ

martes, 10 de marzo de 2015

UN TIEMPITO PARA DIOS Y SU PALABRA

Tolerancia y sensibilidad.   "...En aquel tiempo, acercándose Pedro a Jesús le preguntó: Señor, ¿cuántas veces tengo que perdonar las ofensas que me haga mi hermano? ¿Hasta siete veces? Jesús le dijo: No te digo hasta siete veces, sino hasta setenta veces siete.Y les propuso esta parábola: el Reino de los Cielos es semejante a un rey que quiso ajustar cuentas con sus siervos. Al empezar a ajustarlas, le fue presentado uno que le debía diez mil talentos. Como no tenía con qué pagar, ordenó el señor que fuese vendido él, su mujer y sus hijos y todo cuanto tenía, y que se le pagase. Entonces el siervo se echó a sus pies, y postrado le decía: Ten paciencia conmigo, que todo te lo pagaré. Movido a compasión el señor de aquel siervo, le dejó en libertad y le perdonó la deuda. Al salir de allí aquel siervo se encontró con uno de sus compañeros, que le debía cien denarios; le agarró y, ahogándole, le decía: Paga lo que debes. Su compañero, cayendo a sus pies, le suplicaba: Ten paciencia conmigo, que ya te pagaré. Pero él no quiso, sino que fue y le echó en la cárcel, hasta que pagase lo que debía. Al ver sus compañeros lo ocurrido, se entristecieron mucho, y fueron a contar a su señor todo lo sucedido. Su señor entonces le mandó llamar y le dijo: Siervo malvado, yo te perdoné a ti toda aquella deuda porque me lo suplicaste. ¿No debías tú también compadecerte de tu compañero, del mismo modo que yo me compadecí de ti? Y encolerizado su señor, le entregó a los verdugos hasta que pagase todo lo que le debía. Esto mismo hará con vosotros mi Padre celestial, si no perdonáis de corazón cada uno a vuestro hermano".
                                                     Mateo 18, 21-35
       La intolerancia y la insensibilidad que embargan al mundo de hoy es lo que nos hace vivir en esta constante zozobra, por la violencia materializada en los innumerables focos de guerras, guerritas y guerrillas por todos los puntos cardinales. Y eso, la intolerancia y la insensibilidad, se combaten con perdón y misericordia, como nos enseña hoy Jesús, quien nos dice, en cabeza de Pedro, que el perdón debe ser sin límites: "Hasta setenta veces siete". Esto no significa que sea fácil, pero sí, que es indispensable si queremos hacer parte del Reino que vino a traernos. Tenemos que luchar para conseguir que el perdón, una decisión razonada y voluntaria, se convierta en nosotros en un sentimiento permanente, que nos permita estar siempre dispuestos a tolerar y perdonar aquellas cosas de los demás que pudieran ser, de alguna forma, ofensivas para nosotros, y a tener compasión y misericordia con ellos, como Jesús la tiene con nosotros. Y, sobretodo, no olvidemos "mirar, primero, la viga en nuestro ojo, antes que la paja en el del vecino", y que, "con la medida que mides, serás medido".Y,además, 
tengamos presente que Dios es Amor y que, si tenemos el corazón lleno de odios y rencores, Él no podrá estar allí.
Propósito: Hoy procuraré limpiar mi corazón de rencores y malquerencias.
                  ¡ FELIZ DÍA, JESÚS VIVE Y YO LO CREO Y LO PROCLAMO !
                                                                         Martes. Marzo 10 de 2015
J. RUIZ

lunes, 9 de marzo de 2015

UN TIEMPITO PARA DIOS Y SU PALABRA

Profeticemos, aunque nos rechacen.   "...En aquel tiempo dijo Jesús a sus discípulos: En verdad os digo que ningún profeta es bien recibido en su patria. Os digo de verdad: Muchas viudas había en Israel en los días de Elías, cuando se cerró el cielo por tres años y seis meses, y hubo gran hambre en todo el país; y a ninguna de ellas fue enviado Elías, sino a una mujer viuda de Sarepta de Sidón. Y muchos leprosos había en Israel en tiempos del profeta Eliseo, y ninguno de ellos fue purificado sino Naamán, el sirio. Oyendo estas cosas, todos los de la sinagoga se llenaron de ira; y, levantándose, le arrojaron fuera de la ciudad, y le llevaron a una altura escarpada del monte sobre el cual estaba edificada su ciudad, para despeñarle. Pero él, pasando por medio de ellos, se marchó".
                                                                                     Lucas 4, 24-30
      "Ningún profeta es bien recibido en su patria". Talvez esta frase, aprendida desde niños, nos ha servido muchas veces de excusa para no tratar de proclamar el Reino de Dios entre nuestros familiares y conocidos; para no ser "profetas", entre nuestros vecinos y entre los que nos conocen. Profeta es el que habla en nombre de otro, el que lleva el mensaje de otro. Y lo que Jesús nos quiere decir con esta frase no es que nos abstengamos de profetizar a los nuestros porque seremos rechazados, sino que nos lo advierte, para que no nos coja de sorpresa. Fue profeta el Bautista entre los suyos y le costó la vida y lo mismo a Jesús, el mayor de los profetas. Si nos llamamos sus seguidores no podemos sentir miedo ni comer del "qué dirán". Seamos testigos sin condiciones y con las consecuencias que haya que pagar.
Propósito: Hoy procuraré ser testigo de Jesús ante quien se encuentre en mi camino.
                   ¡ FELIZ DÍA, JESÚS VIVE Y YO LO CREO Y LO PROCLAMO !
                                                                          Lunes. Marzo 9 de 2015 
J. RUIZ

domingo, 8 de marzo de 2015

UN TIEMPITO PARA DIOS Y SU PALABRA

La Casa de mi Padre no es una casa de mercado.   "...Se acercaba la Pascua de los judíos y Jesús subió a Jerusalén. Y encontró en el Templo a los vendedores de bueyes, ovejas y palomas, y a los cambistas en sus puestos. Haciendo un látigo con cuerdas, echó a todos fuera del Templo, con las ovejas y los bueyes; desparramó el dinero de los cambistas y les volcó las mesas; y dijo a los que vendían palomas: Quitad esto de aquí. No hagáis de la Casa de mi Padre una casa de mercado. Sus discípulos se acordaron de que estaba escrito: El celo por tu Casa me devorará. Los judíos entonces le replicaron diciéndole: Qué señal nos muestras para obrar así? Jesús les respondió: Destruid este Santuario y en tres días lo levantaré. Los judíos le contestaron: Cuarenta y seis años se han tardado en construir este Santuario, ¿y tú lo vas a levantar en tres días? Pero él hablaba del Santuario de su cuerpo. Cuando resucitó, pues, de entre los muertos, se acordaron sus discípulos de que había dicho eso, y creyeron en la Escritura y en las palabras que había dicho Jesús. Mientras estuvo en Jerusalén, por la fiesta de la Pascua, creyeron muchos en su nombre al ver las señales que realizaba. Pero Jesús no se confiaba a ellos porque los conocía a todos. y no tenía necesidad de que se le diera testimonio acerca de los hombres, pues él conocía lo que hay en el hombre".
                               Juan 2, 13-25
       También yo soy templo de Dios, pero el orgullo, la envidia, la pereza, la lujuria, la injusticia, la gula, la tacañería, y tantos otros negocios, lo han convertido en plaza de mercado público, y me han hecho olvidar que la Casa de Dios no debe ser "cueva de ladrones". Nuestro trabajo entonces e, mantener limpia la "Casa de mi Padre" de todas esas basuras que la afean y además dificultan e impiden el encuentro íntimo y confiado con Él en la oración, que es para lo que fue construida. Para que allí pueda ir yo a encontrarme con Él y contarle mis alegrías y mis tristezas, mis éxitos y mis fracasos y solicitarle me envíe su sabiduría y discernimiento para saber lo que debo hacer y cómo hacerlo. No olvidemos que somos templos de Dios, como nos dice Pablo.
Propósito: Hoy procuraré hacer limpieza en mi "Casa de Dios".
                    ¡ FELIZ DÍA, JESÚS VIVE Y YO LO CREO Y LO ,PROCLAMO !
                                                                           Domingo. Marzo 8 de 2015  
J. RUIZ

sábado, 7 de marzo de 2015

UN TIEMPITO PARA DIOS Y SU PALABRA

Dios, Padre-Madre de Misericordia.   "...En aquel tiempo, se acercaban a Jesús los publicanos y los pecadores para oírle, y los fariseos y los escribas murmuraban, diciendo: Este acoge a los pecadores y come con ellos. Entonces les dijo esta parábola. Dijo: Un hombre tenía dos hijos; y el menor de ellos dijo al padre: Padre, dame la parte de la hacienda que me corresponde. Y él les repartió la hacienda. Pocos días después el hijo menor lo reunió todo y se marchó a un país lejano donde malgastó su hacienda viviendo como un libertino. Cuando hubo gastado todo, sobrevino un hambre extrema en aquel país, y comenzó a pasar necesidad. Entonces, fue y se ajustó con uno de los ciudadanos de aquel país, que le envió a sus fincas a apacentar puercos. Y deseaba llenar su vientre con las algarrobas que comían los puercos, pero nadie se las daba. Y entrando en sí mismo, dijo: ¡Cuántos jornaleros de mi padre tienen pan en abundancia, mientras que yo aquí me muero de hambre! Me levantaré, iré a mi padre y le diré: Padre, pequé contra el cielo y ante ti. Ya no merezco ser llamado hijo tuyo, trátame como a uno de tus jornaleros. Y, levantándose, partió hacia su padre. Estando él todavía lejos, le vio su padre y, conmovido, corrió, se echó a su cuello y le besó efusivamente. El hijo le dijo: Padre, pequé contra el cielo y ante ti; ya no merezco ser llamado hijo tuyo. Pero el padre dijo a sus siervos: Traed aprisa el mejor vestido y vestidle, ponedle un anillo en su mano y unas sandalias en los pies. Traed el novillo cebado, matadlo, y comamos y celebremos una fiesta, porque este hijo mío estaba muerto y ha vuelto a la vida; estaba perdido y ha sido hallado. Y comenzaron la fiesta. Su hijo mayor estaba en el campo y, al volver, cuando se acercó a la casa, oyó la música y las danzas; y llamando a uno de los criados, le preguntó qué era aquello. Él le dijo: Ha vuelto tu hermano y tu padre ha matado el novillo cebado, porque le ha recobrado sano.El se irritó y no quería entrar. Salió su padre, y le suplicaba. Pero él replicó a su padre: Hace tantos años que te sirvo, y jamás dejé de cumplir una orden tuya, pero nunca me has dado un cabrito para tener una fiesta con mis amigos; y ¡ahora que ha venido ese hijo tuyo, que ha devorado tu hacienda con prostitutas, has matado para él el novillo cebado! Pero él le dijo: Hijo, tú siempre estás conmigo, y todo lo mío es tuyo; pero convenía celebrar una fiesta y alegrarse, porque este hermano tuyo estaba muerto, y ha vuelto a la vida; estaba perdido, y ha sido hallado."
                       Lucas 15, 1-3.11-32
       Es lo mejor (si se puede decir así de quien tiene todo "lo mejor") de nuestro Dios: es Padre-Madre de misericordia. Y en el padre, casi que alcahueta de este relato, está pintado tal y como es. Cuando el hijo arrepentido de todas sus embarradas vuelve dispuesto a hacer lo que sea para merecer el perdón, el padre ni siquiera le pregunta a qué viene. Simplemente lo abraza, lo besa y hace fiesta porque "estaba perdido y ha sido hallado". Y así lo vemos en todos los relatos evangélicos: cuando alguien, un leproso, un cojo, un sordo, una prostituta, llega hasta Él buscando su ayuda, no les pregunta si ya se confesaron, si se arrepintieron de sus faltas, si ya se purificaron, sino que, simplemente, los cura. Perdón y Misericordia de un Dios. ¿Podrá haber algo más grande y atractivo para nosotros? Y si nosotros creemos en su Palabra y la recibimos podremos, además, ser hijos suyos. Entonces ¿qué esperamos?
Propósito: Hoy, con la ayuda del Padre, seré capaz de pedir perdón y de darlo, si es necesario.
                    ¡ FELIZ DÍA, JESÚS VIVE Y YO LO CREO Y LO PROCLAMO !
                                                                           Sábado. Marzo 7 de 2015
J. RUIZ