UN TIEMPITO PARA DIOS Y SU PALABRA

Si me conoces a mi, conoces al Padre     "...Después de lavarles los pies a los discípulos, les dijo: En verdad, en verdad os digo: no es más el siervo que su amo, ni el enviado más que el que le envía. Sabiendo esto, dichosos seréis si lo cumplís. No me refiero a todos vosotros; yo conozco a los que he elegido; pero tiene que cumplirse la Escritura: El que come mi pan ha alzado contra mí su talón. Os lo digo desde ahora, antes de que suceda, para que, cuando suceda, creáis que Yo Soy. En verdad, en verdad os digo: quien acoja al que yo envíe me acoge a mí, y quien me acoja a mí, acoge a Aquel que me ha enviado".                                                                         Juan 13, 16-20       "Quien acoja al que yo envíe, me acoge a mí, y quien me acoja a mí, acoge a a Aquel que me ha enviado". Debemos acoger y seguir a nuestros pastores porque son los enviados de Jesús y es como si le acogiéramos a Él, y, acogiéndole a Él, acogemos al Padre. Pero a veces hay falsos pastores, lobos vestidos con piel de oveja, tratando de desviarnos del que es el Camino, la Verdad y la Vida. Pero si estamos atentos a la lectura de las Escrituras y a las enseñanzas y tradición de la Iglesia, vamos aprendiendo a conocerlos, a identificarlos y no podrán engañarnos. Oración, que es comunión con el Padre, lectura de la Biblia, y amor y servicio a los demás, como nos lo perpetuó Jesús en el Lavatorio de los pies a sus discípulos, es la manera de estar seguros de que le estamos conociendo y acogiendo. Propósito: Hoy procuraré conocer y acoger mejor a Jesús en mi trato con los demás.                   ¡ FELIZ DÍA, JESÚS VIVE Y YO LO CREO Y LO PROCLAMO ! J. RUIZ