"...En aquel tiempo, llegada la hora de cenar, se sentó Jesús con sus discípulos y les dijo: Cuánto he deseado celebrar esta Pascua con ustedes, antes de padecer, porque yo les aseguro que ya no la volveré a celebrar, hasta que tenga cabal cumplimiento en el Reino de Dios. Luego tomó en sus manos una copa de vino, pronunció la acción de gracias y dijo: Tomen esto y repártanlo entre ustedes, porque les aseguro que ya no volveré a beber del fruto de la vid hasta que venga el Reino de Dios.Tomando después un pan, pronunció la acción de gracias, lo partió y se los dio diciendo: Esto es mi cuerpo, que se entrega por ustedes. Hagan esto en memoria mía. Después de cenar, hizo lo mismo con una copa de vino, diciendo: Esta copa es la nueva alianza, sellada con mi sangre, que se derrama por ustedes”.
Lucas 22, 14-20
Gesto hermoso del Amigo que puede y desea permanecer con nosotros.- Se hace alimento y sangre y vida por nosotros, para quedarse con nosotros y en nosotros. Para que podamos ser uno con Él, como Él lo es con el Padre y con el Espíritu Creador. Y para que, cada vez que lo recibamos, pensemos en lo que hizo por nosotros: entregó su vida de la manera más dolorosa y vergonzosa, como un malhechor, en una secuencia de dolor que lo llevó al borde de la desesperación: "Padre, si es posible, aparta de mí este cáliz". No echemos a perder esta Nueva Alianza que Él ha firmado con su propia sangre. Seamos fieles y respondamos con amor y gratitud, proclamando, con nuestras palabras y nuestra forma de vida en amor y en servicio, a esa muestra inigualable de su amor.
Propósito: Hoy haré una meditación especial para ver cómo andan mis parámetros de fidelidad.
¡ FELIZ DÍAS, JESÚS VIVE Y YO LO CREO Y LO PROCLAMO !
Jueves. Junio 13 de 2019
J. RUIZ
No hay comentarios:
Publicar un comentario