viernes, 6 de enero de 2017

UN TIEMPITO PARA DIOS Y SU PALABRA

   "...Nacido Jesús en Belén de Judea, en tiempo del rey Herodes, unos magos que venían del Oriente se presentaron en Jerusalén, diciendo: ¿Dónde está el Rey de los judíos que ha nacido? Pues vimos su estrella en el Oriente y hemos venido a adorarle. AL oír esto, el rey Herodes se sobresaltó y con él toda Jerusalén. Convocó a todos los sumos sacerdotes y escribas del pueblo, y por ellos se estuvo informando del lugar donde había de nacer el Cristo. Ellos le dijeron: En Belén de Judea, porque así está escrito por medio del profeta: Y tú, Belén, tierra de Judá, no eres, no, la menor entre los principales clanes de Judá; porque de ti saldrá un caudillo que apacentará a mi pueblo Israel.Entonces Herodes llamó aparte a los magos y por sus datos precisó el tiempo de la aparición de la estrella. Después, enviándolos a Belén, les dijo: Id e indagad cuidadosamente sobre ese niño; y cuando le encontréis, comunicádmelo, para ir también yo a adorarle. Ellos, después de oír al rey, se pusieron en camino, y he aquí que la estrella que habían visto en el Oriente iba delante de ellos, hasta que llegó y se detuvo encima del lugar donde estaba el niño. Al ver la estrella se llenaron de inmensa alegría. Entraron en la casa; vieron al niño con María su madre y, postrándose, le adoraron; abrieron luego sus cofres y le ofrecieron dones de oro, incienso y mirra. Y, avisados en sueños que no volvieran donde Herodes, se retiraron a su país por otro camino".
                 Mateo 2, 1-12
       Sólo quien busca a Dios, lo encuentra.- Y únicamente si se tiene la esperanza de encontrar, se busca. Debemos los cristianos, como los sabios de oriente, abrir nuestro corazón para acoger las señales que nos sean dadas, y, entonces, con esa esperanza, salir a buscar al Rey que nos ha de conducir a su Nuevo Reino de amor, justicia y paz, sin ningún temor a las dificultades o a las amenazas que puedan surgir en el camino. Él mismo nos enviará la luz, la estrella, que nos guiará hasta el fin de nuestro peregrinar, en donde, llenos de alegría, podremos "adorarle en espíritu y en verdad", todos los pueblos de la tierra, y entregarle generosamente todo lo que somos, como a único Rey y Señor de nuestras vidas.
Propósito: Hoy me dejaré guiar por la luz nueva que viene desde el sentir del Papa Francisco por una Iglesia pobre y para los pobres.
                    ¡ FELIZ DÍA, JESÚS VIVE Y YO LO CREO Y LO PROCLAMO !
                                                                           Viernes. Enero 6 de 2017
J. RUIZ

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