lunes, 15 de abril de 2019

UN TIEMPITO PARA DIOS Y SU PALABRA


   "...Cuando dijo estas palabras, Jesús se turbó en su interior y declaró: En verdad, en verdad os digo que uno de vosotros me entregará. Los discípulos se miraban unos a otros, sin saber de quién hablaba. Uno de sus discípulos, el que Jesús amaba, estaba a la mesa al lado de Jesús. Simón Pedro le hace una seña y le dice: Pregúntale de quién está hablando. El, recostándose sobre el pecho de Jesús, le dice: Señor, ¿quién es? Le responde Jesús: Es aquel a quien dé el bocado que voy a mojar. Y, mojando el bocado, le toma y se lo da a Judas, hijo de Simón Iscariote. Y entonces, tras el bocado, entró en él Satanás. Jesús le dice: Lo que vas a hacer, hazlo pronto. Pero ninguno de los comensales entendió por qué se lo decía. Como Judas tenía la bolsa, algunos pensaban que Jesús quería decirle: Compra lo que nos hace falta para la fiesta, o que diera algo a los pobres. En cuanto tomó Judas el bocado, salió. Era de noche. Cuando salió, dice Jesús: Ahora ha sido glorificado el Hijo del hombre y Dios ha sido glorificado en él. Si Dios ha sido glorificado en él, Dios también le glorificará en sí mismo y le glorificará prontoHijos míos, ya poco tiempo voy a estar con vosotros. Vosotros me buscaréis, y, lo mismo que les dije a los judíos, que adonde yo voy, vosotros no podéis venir, os digo también ahora a vosotros.Simón Pedro le dice: Señor, ¿a dónde vas? Jesús le respondió: Adonde yo voy no puedes seguirme ahora; me seguirás más tarde. Pedro le dice: ¿Por qué no puedo seguirte ahora? Yo daré mi vida por ti. Le responde Jesús: ¿Que darás tu vida por mí? En verdad, en verdad te digo: no cantará el gallo antes que tú me hayas negado tres veces".
                                                                                                       Juan 13, 21-33.36-38
      El Evangelio de hoy nos cuenta un episodio de entregas, negaciones y traiciones.- Judas, uno de los discípulos de Jesús, ha sido tentado y ha caído víctima de la ambición. Pedro, otro de los preferidos, por tres veces va a negar que conoce a Jesús, por culpa del miedo y la cobardía. Eso pasó hace ya más de dos mil años y se sigue repitiendo cada vez que "se hace de noche" en nuestras vida por habernos alejado de Jesús por culpa de nuestra propia cobardía o de nuestra ambición, que nos hace perder el rumbo que el Maestro nos ha ido trazando con su Palabra a través de la historia y de la vida. Pero, si nos arrepentimos, como Pedro, y como él lloramos nuestra traición con lágrimas de verdadero arrepentimiento, podremos retomar la ruta y volver al Dios del perdón y de la misericordia, para ser recibidos de nuevo en la familia.
Propósito: Hoy, de rodillas, pediré perdón al Señor por tantas veces que me he alejado de su lado.
                       ¡ FELIZ DÍA, JESÚS VIVE Y YO LO CREO Y LO PROCLAMO !
                                                                               Martes. Abril 16 de 2019
J. RUIZ

No hay comentarios:

Publicar un comentario