miércoles, 6 de febrero de 2019

UN TIEMPITO PARA DIOS Y SU PALABRA


   "...Salió Jesús de allí y vino a su patria, y sus discípulos le siguen. Cuando llegó el sábado se puso a enseñar en la sinagoga. La multitud, al oírle, quedaba maravillada, y decía: ¿De dónde le viene esto? y ¿qué sabiduría es ésta que le ha sido dada? ¿Y esos milagros hechos por sus manos? ¿No es éste el carpintero, el hijo de María y hermano de Santiago, José, Judas y Simón? ¿Y no están sus hermanas aquí entre nosotros? Y se escandalizaban a causa de él. Jesús les dijo: Un profeta sólo en su patria, entre sus parientes y en su casa carece de prestigio. Y no podía hacer allí ningún milagro, a excepción de unos pocos enfermos a quienes curó imponiéndoles las manos. Y se maravilló de su falta de fe. Y recorría los pueblos del contorno enseñando".
                                                                                                           Marcos 6, 1-6
      "La grandeza más grande se expresa en la pequeñez más pequeña...".- Como dice el Papa Francisco en alguna homilía. Y es que las cosas maravillosas que Dios hace, los milagros, nos enseñan dos cosas: su poder infinito y la fragilidad y necesidad inmensa que nosotros tenemos de Él. Tenemos que pedirle que nos enseñe a conocer su presencia, siempre especial, en las cosas sencillas y rutinarias de la vida. Que nos enseñe a llevar, como Él, una vida sencilla, sin ostentaciones de tenencia de bienes o de poder, ajustada a sus enseñanzas de amor y misericordia y así, algún día, aún los familiares y vecinos comprenderán porqué somos testigos y acogerán también esa manera de vivir. Y así los profetas lo serán también en su patria y en su casa.
Propósito: Hoy estaré atento a la manifestación de Dios en medio de mi rutina diaria.
                      ¡ FELIZ DÍA, JESÚS VIVE Y YO LO CREO Y LO PROCLAMO !
                                                                       Miércoles. Febrero 6 de 2019
J. RUIZ 

No hay comentarios:

Publicar un comentario