lunes, 28 de enero de 2013

UN TIEMPITO PARA DIOS Y SU PALABRA


Un reino no puede estar dividido
Un reino no puede estar dividido
   "...Los escribas que habían bajado de Jerusalén decían: Está poseído por Beelzebul y por el príncipe de los demonios expulsa los demonios. El, llamándoles junto a sí, les decía en parábolas: ¿Cómo puede Satanás expulsar a Satanás? Si un reino está dividido contra sí mismo, ese reino no puede subsistir. Si una casa está dividida contra sí misma, esa casa no podrá subsistir. Y si Satanás se ha alzado contra sí mismo y está dividido, no puede subsistir, pues ha llegado su fin. Pero nadie puede entrar en la casa del fuerte y saquear su ajuar, si no ata primero al fuerte; entonces podrá saquear su casa. Yo os aseguro que se perdonará todo a los hijos de los hombres, los pecados y las blasfemias, por muchas que éstas sean. Pero el que blasfeme contra el Espíritu Santo, no tendrá perdón nunca, antes bien, será reo de pecado eterno. Es que decían: Está poseído por un espíritu inmundo".
                                                        Marcos 3, 22-30
       "Si una casa está dividida contra sí misma, esa casa no podrá subsistir". Lo dijo Jesús. Entonces ¿porqué persiste esa división en la Iglesia católica? Creo yo que la Teología de la Liberación, nacida en América Latina, tuvo mucho que ver con la convocatoria del Papa Bueno, Juan XXIII, al Concilio Vaticano II, buscando, entre otras cosas lograr esa unidad que tanta falta hacía y continúa haciendo. Pero hoy, después de cincuenta años, la opción por los pobres, que es la clave en que hay que leer los Evangelios y la vida de Jesús, asusta a gran parte de esa Iglesia, especialmente muchas de las altas jerarquías. No quieren entender (¿será blasfemia contra el Espíritu Santo?) que esa imagen de Dios, juez terrorífico, condenando y castigando, con la llegada de Jesús, que vino a anunciar la Buena Nueva del Reino de Dios entre nosotros, y a mostrar cómo hay que vivir en ese Reino, ha sido sustituída por la del Padre compasivo y misericordioso, que no habla sino de amor, compasión y perdón. En este AÑO DE LA FE, luchemos pues, porque ésta sea única alrededor del Único que merece que la depositemos toda y totalmente en Él: Jesús, el Padre Bueno, el Maestro y Pastor que dá la vida por sus ovejas.
Propósito: Hoy haré una oración especial por la unidad de la Iglesia y para que el Señor me ilumine de qué forma puedo contribuir a ella.
                             ¡ FELIZ DÍA, JESÚS VIVE Y YO LO CREO Y LO PROCLAMO !
                                                                              Lunes. Enero 28 de 2013
J. RUIZ

No hay comentarios:

Publicar un comentario