La observancia del sábado. "...Caminando Jesús a través de las mieses en día de sábado, sus discípulos, mientras iban, comenzaron a arrancar espigas. Los fariseos le dijeron: Mira, ¿cómo hacen en sábado lo que no está permitido? Y les dijo: ¿Nunca habéis leído lo que hizo David cuando tuvo necesidad y sintió hambre él y los suyos? ¿Cómo entró en la casa de Dios, bajo el pontificado de Abiatar, y comió de los panes de la proposición, que no es lícito comer sino a los sacerdotes, y los dio asimismo y a los suyos? Y añadió: El sábado ha sido hecho para el hombre, y no el hombre para el sábado. Y dueño del sábado es el Hijo del hombre".
Marcos 2, 23-28
A los fariseos no es que les importara tanto la guarda de la Ley. Lo que pasa es que, cuando les convenía, como la conocían tan bien, trataban de interpretarla acomodándola de acuerdo a su conveniencia y beneficio. No habían entendido que la ley no podrá estar nunca por encima de la caridad. Porque el espíritu que inspiró esa Ley fue, precisamente, el de buscar siempre lo mejor para la persona humana y para la comunidad. Y el Señor, que es dueño del tiempo y del descanso, nos lo ha dado para que lo compartamos con Él y con los demás en comunión de amor y de servicio.
Propósito: Hoy revisaré si mi cumplimiento de las normas sólo hago por deber o por amor.
¡ FELIZ DÍA, JESÚS VIVE Y YO LO CREO Y LO PROCLAMO !
Martes. Enero 20 de 2015
J. RUIZ
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