"Porque ha puesto sus ojos en la humildad de su esclava". "...Y dijo María: Engrandece mi alma al Señor y mi espíritu se alegra en Dios mi salvador, porque ha puesto los ojos en la humildad de su esclava; por eso, desde ahora todas las generaciones me llamarán bienaventurada, porque ha hecho en mi favor maravillas el Poderoso, Santo es su nombre y su misericordia alcanza de generación en generación a los que le temen. Desplegó la fuerza de su brazo, dispersó a los que son soberbios en su propio corazón. Derribó a los potentados de sus tronos y exaltó a los humildes. A los hambrientos colmó de bienes y despidió a los ricos sin nada. Acogió a Israel, su siervo, acordándose de su misericordia como había anunciado a nuestros padres en favor de Abraham y de su linaje por los siglos. María permaneció con ella unos tres meses, y se volvió a su casa".
Lucas 1, 46-56
Es por eso por lo que María se alegra, no porque haya sido "escogida". Es que ella sí entiende la forma como el Creador quiere que sea este mundo que nosotros hemos volteado al revés con nuestro egoísmo y nuestra soberbia que nos hace creernos los "reyes de la creación"; que las cosas son, no como Dios en su infinita sabiduría las dispuso, sino como nosotros, con nuestra imbécil suficiencia, creemos que deben ser. Todo lo complicamos y lo volvemos difícil como si en eso estuvieran la sabiduría y la alegría. "Volvamos a Jesús", volvamos a las raíces, volvamos a Galilea, como les pidió Él a sus discípulos después de su Resurrección. Allí podremos beber de la fuente "el agua que salta para la vida eterna" en la vida sencilla y anónima de aquella familia de Jesús, María y José, que sólo vivía para el amor a Dios y el servicio a los demás
Propósito: Hoy procuraré contemplar con los ojos del corazón cómo vivía en Nazareth la Sagrada Familia.
¡ FELIZ DÍA, JESÚS VIVE Y YO LO CREO Y LO PROCLAMO !
Martes. Diciembre 22 de 2015
J. RUIZ
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