Mateo 11, 20-24
Hoy Jesús les echa en cara su falta de fe a aquellas ciudades en donde más milagros ha obrado y sin embargo no quieren aceptar su invitación a seguirlo por el camino seguro de la salvación. Y en ellas estamos representados nosotros que tampoco queremos dejarnos querer por Jesús, pues es todo lo que Él nos pide. Es verdad que cuando las cosas se nos ponen difíciles para lograr sobrevivir con dignidad en este mundo enloquecido de hoy, nos resulta duro comprender y creer que, si nos ponemos en sus manos, podremos lograrlo. Porque seguir a Jesús implica caminar. Y siempre caminar conlleva riesgos: salir de la zona de confort para ir a la aventura. Y si nos acordamos que el que nos guía no tiene "ni donde recostar la cabeza"... Bueno, ahí es donde necesitamos la fe que, aunque es un don, debemos pedirla y hacerla fructificar.
Propósito: Hoy trataré de imitar a María en su abandono total e incondicional a la voluntad del Padre.
¡ FELIZ DÍA, JESÚS VIVE Y YO LO CREO Y LO PROCLAMO !
Martes. Julio 12 de 2016
J. RUIZ
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