Lucas 9, 51-56
Jesús nos recuerda hoy que no vino a perder a los hombres, sino a salvarlos.- Esto por la reprensión que tiene que hacerles a sus discípulos que quieren hacer justicia acabando con unos samaritanos que no les quisieron dar posada por ser judíos. Este Evangelio de hoy es el del perdón total, y el Maestro aprovecha la oportunidad para recordarnos, en la cabeza de santiago y Juan, que son los guerreristas del episodio, que el no vino a hacerle mal a nadie, aunque a Él sí sobra quien lo haga. Él vino fue a salvarnos a todos, a salvar a toda la humanidad, caída en desgracia. Y hoy, después de más de dos mil años, continuamos ofendiendo a Jesús con nuestro desconocimiento de la forma como debemos tratar a los demás, aún a los que nos ofenden, como dice el Padrenuestro. No es sino echar una mirada a cualquier noticiero de cualquier hora: ataques con bombas por todas partes, matanzas como la de ayer en las Vegas, desplazados por los ataques aéreos en varias partes del mundo, y pare de contar. ¿Y el perdón? Palabra que se ha vuelto desconocida en muchos idiomas. Y en nuestro país debería ser palabra de moda, junto con reconciliación, dadas nuestras especiales circunstancias de la paz y la justicia que andamos buscando desesperados, y que tanto nos recordó en todas sus intervenciones el Papa Francisco.
Propósito: Hoy mi oración será: Señor, enséñame a perdonar.
¡ FELIZ DÍA, JESÚS VIVE Y YO LO CREO Y LO PROCLAMO !
Martes. Octubre 3 de 2017
J. RUIZ
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