Juan 15, 9-17
El Padre es Amor, Jesús es Amor, el Espíritu Santo es Amor: Dios es Amor. Si nosotros somos discípulos y seguidores de Jesús, debemos vivir en el Amor. La esencia, el distintivo del cristianismo, es el Amor. Y "en eso conocerán que sois mis discípulos: "si os amáis unos a otros". Y, si somos amigos de Jesús, estaremos siempre dispuestos a hacer lo que Él nos diga. Y, especialmente su última recomendación, hecha al calor de su despedida, fue "que os améis los unos a los otros como yo os he amado". ¿Cómo no vamos a tratar de cumplirla lo mejor posible? Es nuestro amigo quien nos lo pide. Un amigo que fue capaz de sufrir tormentos indecibles y de morir afrentosamente por nosotros. Y no olvidemos que el amor no se limita a no hacer mal a quien quiere, sino que siempre está procurando el bien de aquellos a quienes ama.
Propósito: Hoy trataré de recordar que soy amigo de Jesús y que no debo olvidar su mandato de amar a los demás.
¡ FELIZ DÍA, JESÚS VIVE Y YO LO CREO Y LO PROCLAMO !
Sábado. Mayo 14 de 2016
J. RUIZ
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