UN TIEMPITO PARA DIOS Y SU PALABRA

"...En aquel tiempo Jesús dijo a Nicodemo: Nadie ha subido al cielo sino el que bajó del cielo, el Hijo del hombre. Y como Moisés levantó la serpiente en el desierto, así tiene que ser levantado el Hijo del hombre, para que todo el que crea tenga por Él vida eterna. Porque tanto amó Dios al mundo que dio a su Hijo único, para que todo el que crea en Él no perezca, sino que tenga vida eterna. Porque Dios no ha enviado a su Hijo al mundo para juzgar al mundo, sino para que el mundo se salve por Él".
                           Juan 3, 13-17

      Si queremos alcanzar la salvación eterna, tenemos que mirar siempre hacia la Cruz.- Y recordar que en ella se consumó la gesta maravillosa del rescate que de la humanidad hizo Jesús, Hijo de Dios, con la moneda divina de su sangre. Y por eso, la que entonces era símbolo de muerte y degradación, para nosotros se convirtió en símbolo de vida y salvación. Tengámosla como eje central de nuestra vida espiritual, miremos hacia ella en todas las circunstancias de la vida, especialmente en las horas de oscuridad o de tempestades que pretendan hacernos dejar el camino, y ella será el faro que nos conducirá hasta la Casa del Padre.
Propósito: Hoy repetiré: Te adoramos, oh Cristo y te bendecimos, porque por tu santa Cruz redimiste al mundo.
                       ¡ FELIZ DÍA, JESÚS VIVE Y YO LO CREO Y LO PROCLAMO !
                                                          Viernes. Septiembre 14 de 2018

J. RUIZ