"...En aquel tiempo, Jesús recorría todas las ciudades y aldeas, enseñando en sus sinagogas, proclamando la Buena Nueva del Reino y sanando toda enfermedad y toda dolencia. Y al ver a la muchedumbre, sintió compasión de ella, porque estaban vejados y abatidos como ovejas que no tienen pastor. Entonces dice a sus discípulos: La mies es mucha y los obreros pocos. Rogad, pues, al Dueño de la mies que envíe obreros a su mies. Y llamando a sus doce discípulos, les dio poder sobre los espíritus inmundos para expulsarlos, y para curar toda enfermedad y toda dolencia. A estos doce envió Jesús, después de darles estas instrucciones: Dirigíos más bien a las ovejas perdidas de la casa de Israel. Id proclamando que el Reino de los Cielos está cerca. Curad enfermos, resucitad muertos, purificad leprosos, expulsad demonios. Gratis lo recibisteis; dadlo gratis".
Mt 9,35-10,1.6-8
Todos somos ovejas extraviadas por los caminos embusteros de este mundo.- Pero no podemos olvidar que tenemos un pastor que no nos pierde pie ni pisada, que siempre está pendiente de cada paso que damos y de todas y cada una de las necesidades que se nos van presentando a lo largo del camino. Él siempre sabe cómo resolver todos los problemas y cómo sobrellevarlos mientras llega la solución. Pero debemos estar también nosotros pendientes de qué es lo que nuestro pastor quiere que hagamos, de por dónde quiere que vayamos y estar dispuestos a seguirle porque, con Él dirigiendo nuestros pasos, nada nos faltará y de todo seremos capaces. Este tiempo de Adviento es tiempo de esperanza alegre y confiada porque el proyecto del Padre para nuestra salvación se ha puesto en marcha y ya Jesús, nuestro Pastor, se prepara para venir a proclamarlo. Preparémonos a recibirlo con corazón abierto, alegre y confiado.
Propósito: Hoy recordaré que todo lo que Dios me ha dado es gratis y, por lo mismo, debo compartirlo gratis.
¡ FELIZ DÍA, JESÚS VIVE Y YO LO CREO Y LO PROCLAMO !
Sábado. Diciembre 9 de 2017
J. RUIZ
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