Lucas 21, 12-19
No hay rosas sin espinas ni resurrección sin cruz.- Por eso no debe extrañarnos, a los cristianos, las incomprensiones y las persecuciones, aun de parte de nuestra familia y de nuestros allegados. Todo eso Jesús lo sabía y nos alertó claramente sobre ello en varias oportunidades. Pero, al mismo tiempo, nos informaba que no debíamos preocuparnos porque Él nos daría la sabiduría, elocuencia y fortaleza necesarias para doblegar a nuestros adversarios y perseguidores. Solamente no debemos olvidar que estamos bajo su cuidado y que es tan eficiente que no se olvida "ni de un cabello de nuestra cabeza". Fe y perseverancia en ella "salvarán nuestras almas".
Propósito: Hoy repetiré mi oración: Señor, aumenta mi fe y ayuda a mi incredulidad.
¡ FELIZ DÍA, JESÚS VIVE Y YO LO CREO Y LO PROCLAMO !
Miércoles. Noviembre 23 de 2016
J. RUIZ
No hay comentarios:
Publicar un comentario