Los tiempos en que una buena señora se afligía y preocupaba porque, por estar atendiendo a su hijo enfermo, no iba a misa un domingo y entonces ya estaba pecando, ya han pasado. O cuando uno creía que si llegaba después del Evangelio, por ayudar a una anciana a cruzar una calle, se quedaba sin oir misa. Estos ejemplos son del siglo pasado que aun no está tan lejos. Y tengo entendido que todavía hoy hay gente que piensa así. No. El Señor del sábado nos enseña que primero está la dignidad del hombre que cumplir con una norma. Estas son cuestión del intelecto y a Dios hay que servirle es con el corazón, que es quien dicta las normas del amor.
Propósito: Hoy trataré de no olvidar que "lo primero es lo primero"
¡ FELIZ DÍA, JESÚS VIVE Y YO LO CREO Y LO PROCLAMO !
J. RUIZ
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