"...Habéis oído que se dijo: No cometerás adulterio. Pues yo os digo: Todo el que mira a una mujer deseándola, ya cometió adulterio con ella en su corazón. Si, pues, tu ojo derecho te es ocasión de pecado, sácatelo y arrójalo de ti; más te conviene que se pierda uno de tus miembros, que no que todo tu cuerpo sea arrojado a la gehenna. Y si tu mano derecha te es ocasión de pecado, córtatela y arrójala de ti; más te conviene que se pierda uno de tus miembros, que no que todo tu cuerpo vaya a la gehenna. También se dijo: El que repudie a su mujer, que le dé acta de divorcio. Pues yo os digo: Todo el que repudia a su mujer, excepto el caso de fornicación, la hace ser adúltera; y el que se case con una repudiada, comete adulterio".
Mateo 5, 27-32
No es posible que sea pecado mirar y admirar a la obra más maravillosa de la creación de Dios.- La falta, el delito, está en cosificar y en menospreciar tanta bondad y belleza, reduciéndola sólo a la identidad de un juguete que nos pueda causar placer. Lo que Jesús trata de que entendamos es la seriedad y radicalidad conque la Ley debe ser tomada. No hay necesidad de cortarse la mano o el pie, o de sacarse los ojos, pero sí es necesario que, a través de la letra de la ley, lleguemos hasta la intención que el Legislador tuvo al promulgarla. Porque esta ley, la del adulterio, como todas las demás, fueron instituidas para nuestro bien; para que podamos cumplir, de la mejor manera, su máximo mandato: "amaos los unos a los otros como yo os he amado".
Propósito: Hoy estaré pendiente del verdadero alcance de las leyes que deba cumplir.
¡ FELIZ DÍA, JESÚS VIVE Y YO LO CREO Y LO PROCLAMO !
Viernes. Junio 14 de 2019
J. RUIZ
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