UN TIEMPITO PARA DIOS Y SU PALABRA

Curación de un ciego    "...Jesús y sus discípulos llegan a Betsaida. Le presentan un ciego y le suplican que le toque. Tomando al ciego de la mano, le sacó fuera del pueblo, y habiéndole puesto saliva en los ojos, le impuso las manos y le preguntaba: ¿Ves algo? Él, alzando la vista, dijo: Veo a los hombres, pues los veo como árboles, pero que andan. Después, le volvió a poner las manos en los ojos y comenzó a ver perfectamente y quedó curado, de suerte que veía de lejos claramente todas las cosas. Y le envió a su casa, diciéndole: «Ni siquiera entres en el pueblo".                                                                              Marcos 8, 22-26        La visión que Dios quiere para nuestra vida espiritual es una visión clara y limpia. Que "veamos" verdaderamente si todo lo que hacemos está de acuerdo con los parámetros que marca mi fe en Él. Porque hay tantas cosas que nos empañan esa visión: el odio, la envidia, el egoísmo, el tener por tener, al querer estar siempre a la moda, cueste lo que cueste, el menosprecio de los más débiles, son como "cataratas" que nos deforman la visión y nos hacen "ver" las cosas del Reino desde perspectivas que no son. No olvidemos nunca que Jesús es la Luz que acaba con todas las sombras de nuestro camino. Propósito: Hoy procuraré recordar que Jesús es la Luz que ilumina mi sendero.                     ¡ FELIZ DÍA, JESÚS VIVE Y YO LO CREO Y LO PROCLAMO !                                                                      Miércoles. Febrero 19 de 2014         J. RUIZ