UN TIEMPITO PARA DIOS Y SU PALABRA

Jesús predica en Galilea    "...Al enterarse Jesús de que Juan había sido entregado, se retiró a Galilea. Y dejando Nazaret, se fue a vivir a Cafarnaúm junto al mar, en el término de Zabulón y Neftalí; para que se cumpliera el oráculo del profeta Isaías:¡Tierra de Zabulón, tierra de Neftalí, camino del mar, allende el Jordán, Galilea de los gentiles!. El pueblo que habitaba en tinieblas ha visto una gran luz; a los que habitaban en paraje de sombras de muerte una luz les ha amanecido. Desde entonces comenzó Jesús a predicar y decir: Convertíos, porque el Reino de los Cielos ha llegado. Recorría Jesús toda Galilea, enseñando en sus sinagogas, proclamando la Buena Nueva del Reino y curando toda enfermedad y toda dolencia en el pueblo. Su fama llegó a toda Siria; y le trajeron todos los que se encontraban mal con enfermedades y sufrimientos diversos, endemoniados, lunáticos y paralíticos, y los curó. Y le siguió una gran muchedumbre de Galilea, Decápolis, Jerusalén y Judea, y del otro lado del Jordán".                                                                   Mateo 4, 12-17. 23-25        No hay tiempo que perder. Desde ya nos muestra la Iglesia a Jesús predicando la Buena Noticia de que el Reino de Dios ha llegado y hay que convertirse. Se ha cumplido la profecía de Isaías y "al pueblo que habitaba en tinieblas ha llegado una gran luz". Y nosotros, las gentes de hoy, como aquellos discípulos de entonces, estamos llamados a continuar llevando esa luz de la Palabra a todos aquellos que, hasta ahora y por cualquier circunstancia, aún no la han recibido. Y, como Jesús que pasaba "curando toda enfermedad y toda dolencia en el pueblo", debemos nosotros procurar hacer el bien que, dentro de nuestras evidentes limitaciones, nos sea posible. Propósito: Hoy, Señor, ayúdame a ser luz para alguien.                        ¡ FELIZ DÍA, JESÚS VIVE Y YO LO CREO Y LO PROCLAMO !                                                                         Martes. Enero 7 de 2014 J. RUIZ