Juan 15, 18-21
Tenemos que tomar conciencia de que todo lo que a diario nos sucede, es manifestación del amor de Dios hacia nosotros.- El despertar con salud todos los días, el tener un techo y un lecho donde poder descansar de los afanes del día, el tener el alimento necesario, el tener una familia, el encontrar amigos con quienes compartir, el poder disfrutar de un trabajo que dignifica nuestra calidad de persona. Todo eso y mucho más hace parte de la manera especial con que Dios, nuestro Creador, nos trata. Pero a veces tratamos de cambiar algunas de esas cosas adaptándolas a nuestras preferencias o caprichos, sin pensar que somos nosotros los que tenemos que adaptarnos, porque "Cristo es el mismo, ayer, hoy y siempre". Y que la lucha, sin importar las consecuencias que ello nos pueda acarrear, es por los valores y principios que, con sus enseñanzas y su ejemplo, nos dejó, y que nos marcan el camino para llegar a la plenitud de la vida prometida y que no acabará jamás, como sí lo hacen las cosas pasajeras de este mundo.
Propósito: Hoy agradeceré a Dios sus infinitos favores, manifestándolos con mi alegría de vivir.
¡ FELIZ DÍA, JESÚS VIVE Y YO O CREO Y LO PROCLAMO !
Sábado. Mayo 5 de 2018
J. RUIZ
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