UN TIEMPITO PARA DIOS Y SU PALABRA

   "...En aquel tiempo Jesús dijo a sus discípulos: en verdad, en verdad os digo que si el grano de trigo no cae en tierra y muere, queda él solo; pero si muere, da mucho fruto. El que ama su vida, la pierde; y el que odia su vida en este mundo, la guardará para una vida eterna. Si alguno me sirve, que me siga, y donde yo esté, allí estará también mi servidor. Si alguno me sirve, el Padre le honrará".
                                    Juan 12, 24-26

      La semilla sólo podrá tener fecundidad eficaz, si muere.- Si se entrega hasta desaparecer para dar lugar a una nueva planta. Si nosotros queremos ser semilla en el Nuevo Reino, si de veras amamos a Jesús quien nos lo propone, tenemos que entregar toda nuestra vida a su servicio y al de los demás, por amor a Él, como lo hizo San Lorenzo, fiesta de hoy en la liturgia católica. Así podremos estar donde Él está y el Padre nos honrará. Debemos amar la vida en este mundo sólo como la oportunidad de proclamar, con nuestra coherencia vital, la otra vida, la verdadera, que no tendrá fin y para la que fuimos creados por la misericordia del Padre.
Propósito: Hoy trataré de examinar la fecundidad de mi experiencia vital.
                       ¡ FELIZ DÍA, JESÚS VIVE Y YO LO CREO Y LO PROCLAMO !
                                                                Viernes. Agosto 10 de 2018
J. RUIZ