UN TIEMPITO PARA DIOS Y SU PALABRA

Elección de los doce    "...Sucedió que por aquellos días se fue Jesús al monte a orar, y se pasó la noche en la oración de Dios. Cuando se hizo de día, llamó a sus discípulos, y eligió doce de entre ellos, a los que llamó también apóstoles. A Simón, a quien llamó Pedro, y a su hermano Andrés; a Santiago y Juan, a Felipe y Bartolomé, a Mateo y Tomás, a Santiago de Alfeo y Simón, llamado Zelotes; a Judas de Santiago, y a Judas Iscariote, que llegó a ser un traidor. Bajando con ellos se detuvo en un paraje llano; había una gran multitud de discípulos suyos y gran muchedumbre del pueblo, de toda Judea, de Jerusalén y de la región costera de Tiro y Sidón, que habían venido para oírle y ser curados de sus enfermedades. Y los que eran molestados por espíritus inmundos quedaban curados. Toda la gente procuraba tocarle, porque salía de Él una fuerza que sanaba a todos".                          Lucas 6, 12-19        Entre las enseñanzas que hoy nos trae el Evangelio están dos muy especiales: Una, la necesidad, para la vida espiritual, de estar en contacto con el Padre por medio de la oración íntima y confiada y frecuente, por no decir, permanente. Jesús, que es nuestro Maestro y modelo, así lo hacía, según la narración de Lucas. ¡Se pasaba toda una noche en oración! Y a nosotros se nos hace una eternidad dedicar 15 0 20 minutos a una meditación en conversación con nuestro Padre. Lo otro es, el poder inconmensurable de Jesús, pues de Él "salía una fuerza que sanaba a todos". Entonces ¿cómo no invocar su ayuda en todos los momentos, buenos y malos de nuestra vida? "Lo que es imposible para el hombre, para Dios no lo es". Propósito: Hoy procuraré apreciar más mis momentos de oración.                    ¡ FELIZ DÍA, JESÚS VIVE Y YO LO CREO Y LO PROCLAMO !                                                                     Martes. Septiembre 9 de 2014 J. RUIZ