UN TIEMPITO PARA DIOS Y SU PALABRA

No hay nada oculto     "...En aquel tiempo Jesús dijo a la muchedumbre: Nadie enciende una lámpara y la cubre con una vasija, o la pone debajo de un lecho, sino que la pone sobre un candelero, para que los que entren vean la luz. Pues nada hay oculto que no quede manifiesto, y nada secreto que no venga a ser conocido y descubierto. Mirad, pues, cómo oís; porque al que tenga, se le dará; y al que no tenga, aun lo que crea tener se le quitará".                                                                                    Lucas 8, 16-18        La luz que debe brillar en la actuación de todos los cristianos debe hacerse visible para todos los que están a su alrededor. El amor a Dios y a los demás, manifestado en la vocación de servicio al prójimo, en la compasión por los excluídos y tenidos por menos en la sociedad, debe ser como una luz que descubra la presencia liberadora de Jesús en nosotros y en los demás, y que sea, además, inspiradora para que otros puedan descubrir el camino que lleva al Reino y a la casa del Padre. Que esa sea nuestra misión: dar luz. Propósito: Hoy mi petición al Buen Dios será que me ayude a ser luz.                             ¡ FELIZ DÍA, JESÚS VIVE Y YO LO CREO Y LO PROCLAMO !                                                                              Lunes. Septiembre 23 de 2013 J. RUIZ